Pidió “algo para comer”, pero sacó un arma y asaltó una pizzería céntrica

El ladrón tenía “entre 20 y 25 años” y se llevó hasta la moto del propietario del local. “La vio fácil”, contó el comerciante

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Marcelo (37) abrió su local de comidas hace menos de tres meses en el Centro y ya padeció la inseguridad, la otra pandemia que aflige a los platenses desde hace tiempo. El episodio tuvo lugar el lunes por la noche, cuando en la calle el tránsito era escaso y el poco movimiento favorecía el accionar del ladrón. Otro detalle del caso: en la cuadra funcionaban una carnicería y panadería que cerraron debido a la crisis generada por la cuarentena. “Eso nos dejó un poco solos, porque no queda ningún comercio abierto después de las 19”, explicó la víctima en diálogo con este diario.

Por otra parte, el día del hecho la pizzería situada en diagonal 77 entre 3 y 48 estaba cerrada. Marcelo se encontraba allí circunstancialmente, había ido a preparar la masa para la jornada posterior.

“LA VIO FÁCIL”

“Creo que para él fue una oportunidad, que me vio que estaba solo y pensó que era fácil entrar y robarme”, reflexionó la víctima. Eran las 20.40 y el cocinero se encontraba en plena faena, con la puerta de la persiana metálica abierta para ventilar el local.

Afuera “no pasaba nadie”, por eso lo sorprendió la presencia de un joven (tenía entre 20 y 25 años, según indicó el damnificado) que atravesó el umbral del negocio y se acercó hasta el mostrador. Con las manos detrás de la espalda, saludó y consultó si “no tenía algo para comer”.

Marcelo lo pensó un segundo y recordó que en el freezer tenía algunos panes separados. “Vas a tener que esperar a que se descongelen”, le avisó. El desconocido aceptó sin problemas y permaneció de pie en la entrada. Cada tanto observaba hacia afuera y se tocaba el bolsillo derecho de la campera inflable. Tardó 26 segundos en actuar y mostrar sus verdaderas intenciones.

Mientras el pizzero fue hasta el fondo, sacó una pistola plateada y pasó por debajo de la tabla del mostrador. “¡Tirate al piso porque te mato!”, le ordenó en un susurro mientras no dejaba de apuntarle con el arma de fuego. Y luego lo amenazó: “Te voy a matar hijo de puta, si te movés te mato”.

El día del robo el comercio estaba cerrado: el dueño preparaba masa para la jornada posterior

 

Marcelo no se resistió y el asaltante volvió sobre sus pasos hasta la caja registradora. De allí sacó el cambio que había para el día siguiente, unos 1300 pesos. Después manoteó el celular y le exigió que le entregase las llaves de la moto (incluso le advirtió, “si no la encuentro te mato”, que estaba dentro del comercio.

El atraco duró poco más de un minuto, lapso en el cual el ladrón volvió a insultar y amenazar a la víctima en más de una ocasión, a quien además obligó a encerrarse en el baño. Luego de impartir el último mandato, el delincuente encendió el rodado antes de salir a la calle y huyó por la diagonal a toda velocidad en dirección a calle 4.

Toda la secuencia fue grabada por las cámaras de seguridad instaladas en el interior del local, y en las imágenes se ve con nitidez el rostro del delincuente.

En la zona afirmaron que los atracos “se sufren por temporadas”. Y, en esa línea, detallaron que “hace un par de años vivimos una serie de robos a manos de una banda de menores y adolescentes” que “bajaban por diagonal 80 desde 1 hasta plaza San Martín” y atacaban en los distintos negocios del sector. Sin embargo, “en el último tiempo estuvo tranquilo”, finalizaron.

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