Las pequeñas y medianas empresas estamos muy preocupadas por el aumento de la pobreza y la indigencia, fundamentalmente en los niños, ya que todos conocemos las consecuencias en el presente y sobre todo en el futuro.

Los pymes, somos y seremos parte de la solución, poniéndonos a disposición como entidad y dirigentes para estar a la altura de los desafíos y circunstancias de los difíciles momentos que vislumbramos en el futuro inmediato. Pero muchas pequeñas y medianas ; que representamos más del 98% del total de empresas del país y Generamos más del 80% del Empleo Registrado; estamos convencidos que debemos construir una Oferta Exportable con Valor Agregado , que contribuya a la generación de divisas trabajadas y no que en nuestro país ingresen históricamente con un único objetivo especulativo. Por lo tanto además de apoyar la producción agropecuaria, debemos prepararnos y adecuarnos a las exigencias de los diferentes mercados internacionales construyendo una fábrica de divisas con valor agregado, o sea: trabajo argentino, identidad, experiencia, tecnología, desarrollo y también; materias primas transformadas en esperanza, futuro y felicidad a través del trabajo decente ( definición de la OIT, al trabajo de calidad registrado y con capacitación continua).

Por eso, hoy más que nunca sostenemos que de esta crisis solo salimos con trabajo decente, con las máquinas en marcha a pleno, con reglas y condiciones predecibles, recuperando la mano de obra calificada y calificando a la que todavía no lo está, con salarios que fomenten el consumo, a través de una adecuado comercio exterior inteligente y con identidad digital certificada, que genera confiabilidad y certidumbre sobre las diferentes contrapartes; para eso necesitamos tasa de interés lógicas, con políticas que promuevan la producción en origen, con tasas y servicios privatizados, que por su condición de monopolios privados no tengan ganancias extraordinarias en dólares, con cadenas de valor de mano de obra intensiva, con la incorporación de tecnología, ciencia y conocimientos desarrollados en nuestra república y que reactiven el mercado interno y penetren en el mercado internacional volviendo de esta manera a generar el circulo virtuoso producción-mercado-consumo (nacional e internacional) – desarrollo.

Por lo tanto los próximos tiempos, son momentos de inflexión para nuestra provincia y nuestra república, vencemos una historia de endeudamientos que favorece la especulación; sin trabajo decente o volvemos a la cultura del esfuerzo, el trabajo y la Iniciativa que promueva el contexto adecuado para cambiar la expectativas de nuestras futuras generaciones, ya que el cambio del futuro empieza hoy.

(*) Presidente de CEPBA y Director por el Continente Americano de la WTPF (Word Trade Point Federación)