VIDEO. Desde la tribuna, el drama de los hinchas de Gimnasia: gas pimienta, plateas voladoras y balas de goma

El encuentro entre Gimnasia y Boca, por un lugar en la semifinal de la Copa Argentina, fue, dentro de la cancha, por momentos entretenido, y con dos equipos que intentaban atacar al espacio en todo momento. Luego, en los penales, el "Xeneize", fue más efectivo y lo ganó.

Pero más allá de eso, lo que ocurrió previo al arranque del segundo tiempo y lo que sucedió una vez finalizado el mismo, dejó mucho temor entre los hinchas del Lobo que se encontraban del lado izquierdo de la tribuna visitante.

Allí, los videos que viralizaron los propios hinchas de Gimnasia, demuestran el accionar policial que a base de tiros de bala de goma y de gas pimienta, intentaban que ambas hinchadas, se retiren de la "zona de batalla campal".

"Estábamos tranquilos, cantando en el entretiempo. Comenzaron los insultos y desde la parte alta de la platea, donde estaban los hinchas de Boca, nos empezaron a tirar butacas y bulones, que eran pesados. Nos tratamos de correr, pero eran cada vez más las butacas que volaban, parecían platos voladores", contó un hincha del Lobo que se hizo presente en Rosario, a este medio.

A su vez, una mujer, que estuvo en el partido junto a sus dos hijos, relató: "Nos tuvimos que correr porque teníamos miedo. Tal es así, que encima, la policía en un momento, le da la espalda a los hinchas de Boca que hacían desmanes en la parte baja de esa platea, y comienza a lanzar tiros de bala de goma al aire, para asustar a los de Gimnasia".

El ida y vuelta era constante y allí tuvo que aparecer la figura de Juan Román Riquelme, presidente del club de la Ribera, para intentar "calmar las aguas". 

Bruno, hincha del Lobo, explicó el momento exacto en donde la gente de Boca, venía desde la tribuna hacia la platea: "En un momento vimos un aluvión de hinchas de Boca que iban hacia la platea con ganas de seguir confrontando. Eran tantos para tan pocos policías, que no se sabía como iba a terminar esto. Apareció Riquelme y todo se calmó, pero ante esta `avalancha´ de hinchas, la gente del Lobo también quería reaccionar. Temimos una verdadera `batalla campal´".

Allí, parecía que todo se calmaba. Jorge Baliño pitó el arranque del segundo tiempo y todo se jugó normalmente, aunque la miradas estaban puestas en los efectivos policiales y en los propios hinchas de Boca.

Una vez culminados los segundos 45 minutos, el equipo de Fernando Gago se impuso por penales y el sueño de Copa Argentina, terminó. La gente debía regresar a sus hogares. Algunos, antes, aplaudieron al equipo, para reconocer que había dejado una buena imagen.

Pero otra vez, la policía protagonista. La salida fue casi caótica, ya que sólo un acceso estaba habilitado como para que el público se desconcentre. Allí, la multitud de hinchas del Lobo se fue aglomerando cada vez más.

Con algunos de ellos, enojados por el resultado, reprocharon el accionar policial ante los hinchas que estaban en ese codo de la tribuna donde se produjeron los primeros enfrentamientos.

Ante ello, ocurrió una situación que Joaquín, que estaba junto a un amigo, le contó a EL DIA: "Salimos todos apretados, hasta que un grupo de gente decidió abrir un portón que daba a la platea del otro lado, para que sea todo más rápido. Mientras, nosotros, intentábamos salir por la principal".

Seguido a esta situación, relató cómo fue el accionar de la policía: "Algunos golpeaban las chapas que dividían las rejas con las manos, o patadas. Y allí, vemos que aparecen aerosoles de gas pimienta de la nada, provocando un caos. Encima, no se les ven los rostros a los que los lanzaban, porque se escondían".

Justamente esa situación se puede visualizar en los videos que fueron subidos a las redes sociales, donde aparecen, por delante de los escudos de la misma policía, dos efectivos que tiraban gas pimienta sin mostrar su rostro, ocultándose.

Más tarde, reportaron que además del gas, también volvieron a la escena los tiros con balas de goma, donde algunos hinchas los recibieron directamente en su cara. 

Después de varios minutos, todo se calmó y los simpatizantes triperos pudieron salir del estadio en forma pacífica, aunque con la mirada de reojo en lo que iba a ser la propia policía rosarina.