El abogado acusado de provocar el accidente fatal en 7 y 49 será sometido a una serie de pericias

La Justicia dio inicio esta semana a las pericias de salud mental para el único detenido por el accidente fatal en el cruce de 7 y 49. El abogado acusado de provocar el choque en el que murió la médica oriunda de Pergamino, Ana Fiorino, estará sometido a una serie de análisis para determinar si continúa detenido o logra una morigeración.

Maximiliano Insaurralde, el abogado que se encuentra detenido tras protagonizar el accidente fatal en 7 y 49 el pasado 10 de agosto, se encuentra imputado por el delito de "homicidio simple con dolo eventual".  A raíz de las pericias de salud que le realicen al implicado, la defensa buscará acceder a su libertad o, en su defecto, una prisión domiciliaria. 

El abogado, de 41 años, en aquel entonces fue trasladado hacia el Hospital San Martín donde permaneció internado debido a las heridas sufridas en el impacto con su auto Renault Clio y el Nissan March donde viajaba la pareja de Juan Roldán, de 42 años, y Ana Fiorino, de 41 años.

Desde la cárcel, casi un mes después del accidente, Insaurralde confesó en su declaración desde la cárcel de Olmos estar atravesando hace un tiempo por “problemas personales”, que le impedirían controlar sus acciones y emociones. 

“Sufro una adicción a la cocaína hace muchos años”, afirmó Insaurralde, quien expresó que todo comenzó en 2008, cuando tocaba la guitarra en una banda de rock. Agregó que la noche previa cenó con un amigo, con el que ingirió esa droga, y que a eso de las 3 de la madrugada se fue a su casa, donde tomó una pastilla de clonazepam.

“Recuerdo luces al frente, gente operándome la muñeca y alguien sacándome sangre”, dijo. Y contó: “Me preguntaron si había consumido alcohol o drogas a lo que contesté que sí, creo que eran enfermeros, dentro del Hospital San Martín”.

El fatídico siniestro ocurrió el pasado sábado 10 de agosto a las 7.30 en la esquina céntrica de 7 y 49, cuando el letrado imputado manejaba su auto y Fiorino acompañaba a su pareja, Juan Manuel Roldán, ex agente de la Bonaerense, que conducía otro vehículo por la calle 49. Estaban dejando la ciudad después de una actividad laboral.