Claves de una elección legislativa

1.- QUE SE VOTA EN ESTOS COMICIOS

En las elecciones generales que se realizarán mañana, los 11.688.128 bonaerenses habilitados para votar deberán elegir los representantes de la ciudadanía para los órganos legislativos (el Congreso nacional, las Legislaturas provinciales y los Concejos Deliberantes). No se eligen esta vez cargos ejecutivos (presidente, gobernadores ni intendentes).

Así, este año los bonaerenses votarán para renovar la mitad de sus representantes (35 sobre 70) en la Cámara de Diputados de la Nación. Y eligen también, según la región en que vivan (para ello la Provincia está dividida en ocho Secciones Electorales), sus representantes en el Senado o la Cámara de Diputados bonaerenses, y renuevan la mitad de sus representantes en los Concejos Deliberantes de sus respectivos municipios.

En ese marco, los platenses sumarán su voto a los del resto de los bonaerenses para elegir 35 diputados nacionales por la Provincia. Y sufragarán para renovar los mandatos en las seis bancas que la Ciudad tiene en la Cámara de Diputados de la Provincia, así como para elegir nuevos representantes en 12 de las 24 bancas del Concejo local.

Los vecinos de Berisso, Ensenada, Brandsen, Punta Indio y Magdalena habilitados para votar, en tanto, sumarán su voto para renovar la mitad de los diputados nacionales por la Provincia y elegirán, junto con los ciudadanos del sur del Conurbano (Tercera Sección Electoral) a los 18 diputados provinciales de esa región. Además, con estos comicios, se renovarán 10 bancas en el Concejo Deliberante de Berisso, nueve en el de Ensenada, siete en el de Brandsen, seis en el de Magdalena y cinco en el de Punta Indio.

Los candidatos que resulten electos asumirán sus bancas el 10 de diciembre y formarán parte de la nueva composición de los cuerpos legislativos a nivel nacional, provincial y local.

2.- ¿SE PUEDEN VOTAR LISTAS DE DISTINTAS FUERZAS ELECTORALES?

Sí. En ese contexto, los ciudadanos pueden hacer varias combinaciones de votos.

Pueden votar listas de fuerzas distintas, siempre que correspondan a categorías diferentes de cargos. Concretamente, y por ejemplo, se puede votar por la lista de candidatos a diputados nacionales del Frente A, por la lista de postulantes a diputados provinciales del Frente B y por la lista de candidatos a concejales del Frente C.

También, desde ya, se admiten otras combinaciones: listas de diputados nacionales y provinciales de un Frente A y de concejales del Frente B, por ejemplo.

Hay otras opciones para formular en el cuarto oscuro. Por ejemplo, optar por una lista de candidatos a diputados nacionales de una fuerza, de diputados provinciales de otra y no introducir en el sobra la parte de la sábana de concejales. En este caso, se estaría votando en blanco para esta última categoría.

3.- SI SE CORTAN BOLETAS Y SE COMBINAN LISTAS, ¿QUE NO SE PUEDE HACER?

Lo que no se puede hacer si se cortan boletas para votar listas de distintas fuerzas, es colocar dentro del sobre nóminas de fuerzas diferentes para una misma categoría de cargos.

Por ejemplo, no se puede votar por la lista de diputados nacionales del Frente A y la nómina de diputados nacionales del Frente B. O, en otro ejemplo, por la lista de precandidatos a concejales del Frente C y la lista de precandidatos a concejales del Frente A.

En esos casos, los votos serán anulados por las autoridades de la mesa, y ninguna de las dos fuerzas “elegidas” tendrá el voto para las categorías mencionadas en los ejemplos.

Por eso, las fuerzas electorales recomiendan a los electores que piensen combinar votos de distintas fuerzas, que retiren antes en los locales de campaña de los frentes a los que quieran votar las listas correspondientes, y que lleven el voto armado desde su casa.

4.- COMO SE REPARTEN LAS BANCAS

Para el caso de los diputados nacionales, las fuerzas deben llegar a un piso del 3% de los votos y para la distribución se utiliza el sistema D´Hont. En relación a los legisladores provinciales y concejales, el reparto es por el sistema de Cociente, al que se llega dividiendo la totalidad de los votos válidos (sin contar los blancos) por las bancas en juego. Esa cuenta da un piso al que deben llegar los partidos para conseguir representación parlamentaria.