Dos parejas desafiaron el martes 13 y dieron el "sí"

Dos parejas vencieron la superstición que indica que el "martes 13 no te cases ni te embarques..." y eligieron la fecha de ayer para formalizar sus uniones en el Registro Civil de La Plata. En el primer turno dieron el "sí" Leonardo Garay, profesor de 25 años, y Carina Galeano, estudiante de 24. Para ellos la fecha es un "día de suerte", ya que hace tres años -también un martes 13- se pusieron de novios. Ella llegaba por ese entonces de la ciudad de 9 de Julio y desde que se conocieron -cursando la carrera de informática- supieron que para ellos esta vieja creencia popular, no corría.

Más de cincuenta familiares y amigos se acercaron al Registro Civil de calle 1 y 59 para acompañarlos en este momento especial y no faltaron quienes hicieran referencia a la posible "mala suerte" de casarse un martes 13. A viva voz un amigo del novio decía "no se pueden casar un día como hoy", pero según indicó Carina ayer "se cumplieron 148 semanas" de que están juntos y "casualmente la suma de esos tres números también nos da 13".

Jugando con lo que el número puede representar, un familiar se apresuró a vaticinar que seguramente el azar favorecería a los novios y que saldría el "13 o el 31 a la quiniela" y beneficiaría a los presentes que le apostaron. En tanto, entre risas, otros amigos de la pareja expresaron que "ya bastante mala suerte trae el cambiar de estado civil y abandonar la soltería".

En el segundo turno, la otra pareja, Edgardo Dos Reis y Sandra Coria, se casaron cerca de las once de la mañana. Ellos tienen 35 años y son de nuestra ciudad. El destino los unió de un modo cibernético, ya que se conocieron chateando en abril de 2003 y según aseguraron "el día 13 es de buena suerte, no somos supersticiosos". En este caso la fecha la puso Edgardo y según dijo no fue por nada en particular, aunque un familiar hizo las cuentas de la suma de los números de la casa dónde va a vivir la pareja y le daba "casualmente" 13.

Este flamante matrimonio también manifestó haberle jugado a la quiniela con la ilusión de salvar alguno de los tantos gastos que produjo la ceremonia y seguir apostando a que el número los siga favoreciendo.

Ofició ambos casamientos la jueza Marta Dotro, quien jugando algunas bromas les preguntó a las parejas si habían realizado las cábalas habituales de quienes sostienen que este día es de mala suerte. La funcionaria expresó que desde el Registro Civil no notaron que bajen los casamientos por ser ésta una fecha especial, sino que siempre se formalizan menos uniones de lunes a miércoles.

Por su parte, los habitantes de la Capital Federal parecen evidenciar mayor superstición a la hora de casarse. Según indican los datos las uniones civiles realizadas en Capital Federal bajaron a la mitad con relación al martes de la semana anterior. Once casamientos se produjeron en la jornada de ayer, quizás temiendo "el mal augurio" que presagia la leyenda.