La discusión por un sistema de reglas claras

Edición Impresa

La Organización Mundial de Comercio (OMC) se fundó en 1995, después de ocho años de negociaciones que culminaron en la Ronda Uruguay.

Es la primera vez que la Conferencia tiene como sede a un país sudamericano y reúne a los 164 países miembros para debatir y adoptar decisiones sobre las reglas del comercio global.

La XI Conferencia Ministerial de la Organización Mundial del Comercio (OMC) fue inaugurada ayer en Buenos Aires con la vista puesta en lograr acuerdos y en la defensa de un sistema multilateral de comercio con reglas claras en pro del bienestar social y frente a “la amenaza del proteccionismo”.

Para el Mercosur, cuyos miembros activos son Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, podría significar un avance hacia la firma de un acuerdo de libre comercio con la UE, que viene postergándose desde hace más de una década.

En estas reuniones, principal órgano de adopción de decisiones de la OMC, los ministros examinan la labor que realiza y debaten sobre múltiples cuestiones. En Buenos Aires están previstos por estos días temas de agricultura, subvenciones a la pesca y proveedores de servicios, pero también el comercio electrónico, las inversiones, y las microempresas y pequeñas y medianas empresas.

DIFERENCIAS

Queda por saber si habrá acuerdos en alguno de los asuntos, aunque como recordó en el acto el director de la OMC, Roberto Azevedo, la cita se enfrenta a “algunas divergencias” en algunos temas y “muchas de ellas son muy grandes”.

En este sentido, reconoció que hace años la Organización sufrió una “crisis de credibilidad” por no haber logrado “ningún resultado”, algo que señaló cambió en las últimas Conferencias de Bali (2013) y Nairobi (2015).

Los pilares de la OMC, que por primera vez celebra sus sesiones en un país sudamericano, descansan sobre acuerdos negociados y firmados por la gran mayoría de los países y ratificados por sus respectivos parlamentos.

“El sistema ha contribuido a crear prosperidad en el mundo y a sacar a 1.000 millones de personas la pobreza en una generación”, destacó Azevedo, quien recordó que ante la crisis financiera de 2008 el mundo ya no construyó “barreras”, aunque “existía la tentación de hacerlo”.

Añadió así que esta Conferencia, la primera con Donald Trump como presidente de Estados Unidos -cuya política en defensa del proteccionismo es conocida desde su campaña electoral- debe ser aprovechada para “fijar el rumbo”.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE