El sueño de esquiar en Courchevel, el lujoso Saint-Tropez de los Alpes franceses

Es uno de los más selectos destinos. El pueblo de nieve nació tras la finalización de la Segunda Guerra Mundial y todos los inviernos convoca a los más selecto del jet-set internacional

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Por BERNHARD KRIEGE
Agencia DPA

COURCHEVEL, Francia

En la estación base del teleférico del Verdon cuelga de la pared un anuncio publicitario para grandes yates. ¿Barcos en la montaña? En Courchevel, las dos cosas se combinan.

La estación de esquí en los Alpes franceses no tiene puerto pero recibe a visitantes a los que les gusta navegar en verano a lo largo de la Costa Azul. En invierno, ellos convierten a Courchevel 1850 en un escenario de vanidades y transforman esta aldea de montaña en el “Saint-Tropez de los Alpes”.

Courchevel 1850 es la primera estación de esquí en Francia que nació en la mesa de dibujo. El pueblo artifical se inauguró poco después de la Segunda Guerra Mundial.

La localidad está dominada por chalés y hoteles de lujo en vez de por enormes edificios de hormigón y hoteles para el turismo de masas. Por la noche, la gente adinerada celebra su estilo de vida lujoso en los 20 hoteles de cinco estrellas. Franceses e ingleses, árabes y rusos. Los hoteles se convierten en escenario de la ostentación.

UN PARAÍSO DE NIEVE

“Esquiar no es para todos lo más importante aquí”, confirma Jean-Pierre Lerallu, director general del hotel de gran lujo Les Airelles. Y eso a pesar de que Courchevel, situado en Les Trois Vallées, tiene una zona de esquí grandiosa con 162 telesquís y unos 600 kilómetros de pistas.

Courchevel ofrece muchas formas de diversión y una mezcla perfecta para la clientela. Las dos terceras partes de las pistas son fáciles, alrededor de un 30 por ciento es de mediana dificultad y solo el diez por ciento es difícil.

Courchevel ha organizado copas mundiales y junto con Méribel aspira a ser sede del Mundial de Esquí Alpino en 2023. Quien busque algo más grande que Courchevel puede seguir viaje a Valle de Méribel y desde allí a Val Thorens, la estación de esquí más alta de Europa, donde las pendientes llegan hasta una altura de 3.230 metros.

Raras veces las damas y los caballeros de la alta sociedad van más allá de Méribel para esquiar. Allí, por la tarde, se celebran después del esquí en la cabaña “La Folie Douce” fiestas salvajes con bailarines sobre las mesas. En Courchevel, el lugar más famoso para fiestas es el restaurante “Le Cap Horn”.

“Muchos de nuestros huéspedes vienen en avión o helicóptero para ahorarrse el viaje de unas dos horas en coche desde los aeropuertos de Ginebra o Lyon”, explica el director del hotel Aman Le Melezin, Tim Weiland. Su hotel es lo contrario del bullicioso ambiente de Les Airelles. “Nuestros huéspedes quieren un diseño claro y un lugar tranquilo para descansar”.

La presencia de tantos ricos y gente famosa de los deportes, el mundo del espectáculo y la nobleza hace que uno fácilmente olvide que para la mayoría de los visitantes Courchevel no es un escaparate para vanidades sino simplemente una estación de esquí situada en un lugar de ensueño que ofrece muchas formas de diversión.

NO TODO ES ESQUÍ

“Sin embargo, algunos solo vienen por la buena comida”, dice Weiland. Con varios restaurantes distinguidos con estrellas Michelin, Courchevel es el imán alpino para los gourmets.

El restaurante insignia es el “1947”, de Yannick Alléno, situado en el hotel Cheval Blanc. Al igual que los hoteles de lujo, también los restaurantes de primera clase solo abren en invierno.

“Los restaurantes con estrellas atraen, pero la mayoría de los visitantes quieren comer durante las vacaciones de una manera más informal”, dice Weiland señalando un cambio de tendencia. Por ejemplo, en el nuevo restaurante de su hotel, “Nama”, no se sirven platos de la alta cocina sino sushi y filetes de carne de Wagyu.

La comida en las cabañas es sencilla y de excelente calidad. Especialmente buena y relativamente económica es “La Casserole”. En “Nammos”, lugar de encuentro para la gente guapa, el champán corre a raudales. Y en “Chalet de Pierres”, la cabaña más encantadora, nadie se puede resistir a los postres, ni siquiera las modelos rusas que cuidan su dieta.

 

Datos

Lujo
Courchevel, situada en el departamento de Saboya, es una de las estaciones de esquí más exclusivas de los Alpes. Junto con Méribel y Val Thorens forma la zona de esquí más grande del mundo, Les Trois Vallées.

Avión
Para viajar a Courchevel, primero, se debe llegar en avión a Ginebra (Suiza) o Lyon (Francia) y desde allí en coche de alquiler a Courchevel. El viaje desde cualquier de los dos destinos mencionados, tiene unas dos horas de duración.

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