Rompieron a piedrazos el vidrio de un local de ropa
Edición Impresa | 5 de Septiembre de 2018 | 03:01

En una sucursal de una conocida marca de ropa situada en cercanías de Plaza San Martín, ya están hartos de sufrir actos de vandalismo contra el local.
Según informaron dos empleadas del negocio “Tiza”, situado en la esquina de 5 y 49, con el de ayer ya contabilizaron media docena de casos similares desde que fue inaugurado hace dos años.
Mencionaron que los ataques contra esa sucursal se manifestaron con diversa clase de daños.
Tanto responsables del local como investigadores policiales de esa jurisdicción, sospechan que no serían ajenos a esos episodios algunos de los menores de edad que suelen protagonizar hechos similares en esa zona.
“NOS SALVA LA ALARMA”
Cuando en la tarde de ayer este diario se presentó en el lugar para recabar detalles sobre este nuevo acto de vandalismo, Aldina Borsani y María Eugenia Navarro, ambas vendedoras y de 30 años, comentaron que “esta vez rompieron a piedrazos un vidrio que da sobre calle 49”.
Al igual que en otras oportunidades, los responsables actuaron en horas de la madrugada, amparados en la desolación existente en las calles.
“No sabemos si la idea era primero romper un vidrio para luego entrar a robar o si únicamente les importó causar daño porque sí”, señalaron las empleadas.
Si lo que pretendían era entrar en el salón para robar, “se encontraron con que enseguida se activó la alarma”, reflexionaron las jóvenes.
En ese punto valoraron la importancia de ese dispositivo que “nos salva de que quieran meterse a robar, porque estamos en una zona céntrica y los puede descubrir cualquiera y avisarle a la Policía”.
En tanto, Aldina puntualizó que “en dos años que lleva esta sucursal hubo por lo menos seis episodios de vandalismo”.
Consignó al respecto que “en algunos casos dañaron un vidrio del lado de calle 49, como ahora. Pero también han hecho lo mismo con los paneles de vidrios que dan sobre calle 5. Casi siempre a piedrazos”.
No obstante, indicó también que “en la puerta del frente todavía tenemos hecho un grafiti con ácido, por lo que no puede borrarse”.
Pero además el vandalismo se reflejó “con ralladuras de vidrios, como los que quedaron en el sector de calle 5”.
Reconoció que al no contar este negocio con persianas queda “más expuesto” a sufrir esta clase de ataques.
Por el momento, el comercio sólo cuenta a modo de protección con una reja para la entrada y un sistema con cierre magnético para la puerta del frente que se instaló “por movimientos sospechosos al mediodía”.
Las vendedoras, a su vez, recordaron que “solamente nos robaron en una ocasión, cerca de fines del año pasado”.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE