La luz y el gas, con aumentos de entre 17% y 20% en 2022

Las tarifas de los servicios de energía eléctrica y gas tendrán un incremento de entre 17 y 20% para todo el año 2022. Así lo aseguraron

fuentes de la secretaría de Energía, lo que indicaría que seguirán los subsidios.

El aumento se pondrá en marcha durante los dos primeros meses del año, según trascendió.

“A diferencia de lo ocurrido en 2020 y 2021 donde la pandemia afectó de forma significativa el poder adquisitivo de las familias argentinas y donde, en gran medida, fue el estado nacional el que afrontó el costo incremental de la energía mediante subsidios, en 2022 habrá una actualización en el precio de la energía mediante una recomposición de las tarifas con la finalidad de quitarle presión al sector público y equilibrar el escenario fiscal”, señalaron las fuentes, según el portal de Ámbito.

Además, en las primeras semanas de 2022 el Gobierno buscará poner en marcha la segmentación de las tarifas lo que, en primera instancia, impactará en unos 500.000 usuarios de área metropolitana, que dejarán de pagar un abono subsidiado para afrontar el consumo total.

En la ciudad de Buenos Aires, según informa el portal del diario La Nación, perderán los subsidios los que vivan en propiedades donde el metro cuadrado supere los 3.700 dólares.

Mientras, en la provincia de Buenos Aires, de acuerdo a las fuentes de Energía, se tomará como referencia el valor de la tierra. Además, dejarían de percibir la asistencia los usuarios de barrios cerrados, la actividad financiera, el transporte ferroviario, el juego -bingos y casinos- y las oficinas públicas.

La decisión de aumentar las tarifas se da tras casi dos años de mantener los servicios de luz y el gas prácticamente congelados.

Este año hubo un aumento del 9 por ciento para la luz y del 6 por ciento para el gas, lo que representó para el Gobierno un gasto de dos puntos del PBI, unos US$9.000 millones. Con esta corrección, según explicaron desde la Secretaria de Energía, el costo de los subsidios sería la mitad.

Los porcentajes son los números finales que llegarán a las boletas de los hogares a partir de marzo o abril, una vez registrados y facturados los consumos.

Las boletas están integradas por cuatro componentes: el costo mayorista (de la generación de electricidad o la producción de gas, segmento desregulado); el transporte y la distribución, regulados por los entes; y los impuestos.