Independiente, rival Pincha, logró un empate muy festejado

Antes de llegar para eliminarse con Estudiantes por la Copa de la Liga Profesional, Independiente se presentó anoche con una formación alternativa en Montevideo, por la Copa Sudamericana, y un penal convertido en tiempo de descuento lo afirmó en el Grupo B del certamen continental con agónico empate 1 a 1, jugando buena parte del complemento con 10 jugadores frente a City Torque.

Ni bien se conoció la formación que comenzaría el partido en la capital de Uruguay, quedó confirmado que el Rojo había priorizado el partido del sábado contra el Pincha.

El conjunto de Avellaneda, cuyo rol de DT fue de Pedro Damián Monzón, consideró la posición de líder que ocupaba en el certamen continental, y que tendría dos fechas por delante para corregir en caso de una derrota, para disponer una formación mayoritariamente compuesta por suplentes

Más allá de lo referido, Independiente dejó ver un juego ya característico en el presente ciclo, a partir de una ordenada estructura defensiva y una rápida salida de contra. Antes de cumplirse el primer cuarto de hora, una combinación Braian Martínez-Jonathan Herrera le permitió a este último sacar un zurdazo bajo que hizo golpear la pelota en la base del palo de la mano derecha del arquero.

El esquema de tres centrales, dos marcadores de punta con proyección, cuatro volantes y un referente en ataque, que seguro se repetirá en nuestra ciudad, no le alcanzaron en Montevideo para sacar ventaja y cuando el final del primer tiempo estaba a la vista, un penal lo dejó un gol abajo tras la ejecución de Gustavo Del Prete.

Los ingresos de Alan Velasco y Thomas Ortega pretendieron mejorar el juego de Independiente, aunque la intensidad de City Torque no sólo que estuvo en la misma línea, sino que por momentos resultó superior, y cuando Pacchini se fue expulsado las complicaciones fueron mayores para el conjunto visitante.

Un fuerte cruce de Yonatthan Rak, que mereció la tarjeta roja en lugar de la amarilla que mostró el árbitro calentó los ánimos. Tanto que por reclamar, se fue expulsado Silvio Romero, quien estaba en el banco de los suplentes y se retiró muy enojado con el juez central y el cuarto árbitro. Y cuando la derrota parecía sellada, un penal asegurado por Jonathan Herrera permitió el empate en un final electrizante.