Lidia sopló las cien velitas: vital, tripera y gran cocinera

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Activa, comunicativa y sociable, y preguntando a su familia cuándo podrá volver a ir a la cancha a ver al Gimnasia de sus amores (lo hizo hasta que se declaró el Covid). Con esa vitalidad festejó los 100 años de vida Lidia Masciotto de Baña, vecina del Centro platense, fanática tripera, que celebró su cumpleaños centenario al modo que exige la pandemia: con “burbujas” y diferentes horarios recibió en su departamento a hijos, nietos y bisnietas, que la agasajaron entre un almuerzo y meriendas a lo largo de la tarde.

Lidia nació el 12 de julio de 1921 en Tandil. Muy joven, se mudó a La Plata, donde conoció -concretamente en un baile del club albiazul- al contador público José Baña, con quien se casó y formó una familia que se prolongó en dos hijos (Alberto y Silvia), cinco nietos y tres bisnietas.

Buena cocinera, compañera de su marido y atenta a las necesidades de sus hijos, dedicó su vida al hogar.

 

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