Una temporada especial: a puro protocolo, La Nonna levanta el telón

El teatro La Nonna inaugurará hoy su tradicional programación artística de vacaciones de invierno con una temporada que a pesar de estar marcada por los estrictos protocolos y medidas de cuidado para prevenir contagios de coronavirus tendrá todo el color de los clásicos infantiles además de un enorme valor simbólico.

“Levantar el telón significa volver a casa porque lo que se ha perdido en estos dos años, nosotros que la venimos luchando desde hace tanto con todo lo que nos pasó, no se recupera jamás. Lo importante es que estamos con las mismas ganas de siempre, de seguir haciendo lo que tanto nos gusta: hacer teatro”, aseguró Leo Ringer, en diálogo con EL DIA.

Este regreso a los escenarios, en un marco de incertidumbre creciente, se siente y se vive doblemente especial, en tanto, según agregó el director artístico de la sala ubicada en 3 y 47, significa también “volver a sentir el aroma del teatro, significa darle espacio a esas energías de estos personajes que estuvieron guardadas durante dos años en baúles, camarines y entretelones”.

En este sentido, La Nonna desempolvará a sus mágicas criaturas para ofrecer, desde hoy y hasta el domingo 1 de agosto, dos funciones diarias, a las 14.30 y 16.30, una reducción significativa si se tiene en cuenta que en anteriores temporadas había llegado a presentar hasta 5 funciones por día.

Esta decisión, que se suma a otras similares, se basa en el hecho de reducir al mínimo posible las posibilidades de contagiarse de coronavirus.

Espaciando las funciones no sólo habrá tiempo suficiente para proceder a sanitizar las salas y espacios de circulación del público sino que, además, servirá para evitar el cruce entre los asistentes de una y otra presentación.

Con este fin, el teatro realizó una serie de refacciones en su interior por lo que tendrá habilitadas desde hoy tres puertas: boletería sobre calle 47; ingreso por la ochava de 3 y 47; y egreso por los portones de salida de la calle 3.

Entre las medidas de cuidado disponibles en el teatro se destacan la toma de temperatura de los asistentes, la ventilación cruzada en las salas (se recomienda llevar abrigo), los dispensadores de alcohol en gel y la sanitización en el ingreso que se hará “de manera escalonada, como si se estuviera ingresando a un avión”. Para eso se acondicionó especialmente un espacio, bautizado La Nonna Concert, en el que se podrá esperar cómodamente hasta ese momento.

Según se informó, se hará especial énfasis en el mantenimiento de la distancia social y el correcto uso del barbijo antes, durante y hasta la salida de la sala.

El teatro apelará al conocido sistema de burbujas sociales, y sólo permitirá el aforo del 50% de la sala, dejando sin uso las filas impares.

Dadas las circunstancias, se sugiere reservar previamente en tanto permitirá una mejor planificación de la platea.

Tanto los actores, como el personal administrativo y técnico, estarán protegidos por máscaras traslúcidas, casi imperceptibles, que no perjudicarán el sonido en tanto, cada uno, tendrá sistema de microfonía inalámbrica.

Al momento de la compra de las entradas, se registrarán los datos de los asistentes en el caso de que hubiera que avisar por algún caso positivo. Para compras anticipadas, los espectadores podrán acceder a un descuento del 10% del valor. La entrada general es de $500.

En cuanto a la programación, habrá espectáculos para disfrutar en familia, con títulos recomendados para chicos de entre 3 y 10 años.

“Caperucita Roja”, el gran caballito de batalla de la institución, abrirá y cerrará la temporada (hoy tendrá función a las 14.30 y el domingo 1 de agosto a las 16.30), pero la gran vedette de la programación será sin dudas el infaltable “Los tres chanchitos” que, desde mañana y hasta el sábado 31 de julio, tendrá funciones diarias a las 14.30.

También serán de la partida obras como “Pinocho”, “Hansel y Gretel”, “El Gato con Botas”, “Aladín”, “Blancanieves” y “Princesas”.

Por razones obvias, los personajes no podrán interactuar con los niños y niñas, sin embargo, teniendo en cuenta que ese momento era uno de los más esperados por el público infantil, se diseñó una modalidad a través de la cual podrán saludar a las criaturas de los cuentos que circularán por amplios pasillos.

“Volver a recibir a niños y niñas significa volver a disfrutar de la sonrisa de cada uno al ingresar a un espacio mágico donde conviven la biblia junto al calefón, donde este kitsch deliberado que caracterizó desde 1972 mi estética vanguardista, tiene quien la disfrute y la aprecie, porque cada rincón de La Nonna tiene su magia”, concluyó Ringer, emocionado por poder hacerle frente aún en la adversidad a la temporada número 28 que, la pandemia, había dejado entre paréntesis el año pasado.