La Secundaria 31 marchó para rechazar el traslado de su sede a Los Hornos

Padres, alumnos y docentes de la Escuela Secundaria 31 (ex Comercial San Martín) volvieron a manifestarse ayer para expresar su rechazo al traslado de esa sede al Seminario Menor de Los Hornos. Esto implicaría mudar a una comunidad educativa de unas mil personas desde 46 entre 2 y 3 (donde se encuentra el colegio) hasta 149 entre 62 y 63. Algo así como 80 cuadras de distancia entre un punto y otro.

Para defender la sede de siempre y decir “no al traslado a 8 kilómetros” es que la comunicad educativa marchó hasta las puertas de la Secundaria 31, como parte de una movilización que incluyó una clase pública, aplausazo, corte de calles y pancartas que se hicieron eco del reclamo.

Es que, como argumentan, llevar la escuela a Los Hornos representaría un verdadero problema para el traslado y la educación de cientos de niños y niñas.

En rigor, son más de mil personas las que se encontrarían afectadas por este traslado de un punto de la Ciudad a otro, sin contar los horarios pico en los que el tránsito se vuelve más caótico.

Según detallaron los padres de alumnos, el edificio donde se emplaza la Escuela Secundaria nº31 está en malas condiciones, con problemas de filtraciones en las paredes y en la calefacción. Por eso, llevan tiempo pidiendo por refacciones y obras, como alternativa a la mundanza con la que se desayunaron el viernes anterior al feriado de Carnaval.

Cuando se anoticiaron, miembros de la comunidad educativa fueron hasta la Jefatura Provincial para protestar contra la “medida inconsulta” por parte del Consejo Escolar. Y, como ayer, advirtieron que desde hace dos años reclaman por el comienzo de las obras para reparar un edificio, que, aseguran, es Patrimonio de la Ciudad. Reforzaron además que las limitaciones edilicias van desde filtraciones en las paredes, hasta problemas con las conexiones de luz y gas. E insistieron en la necesidad de resolver esas cuestiones, en lugar de apurar la mudanza a un edificio lejos del centro platense y que, además, depende del arzobispado.

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Precisamente, la dependencia eclesiástica del Seminario Menor de Los Hornos se coló ayer entre las inquietudes de la comunidad educativa: “Si esto se concreta, la escuela pública estaría funcionando dentro de un ámbito religioso y no se respetaría la laicidad de la enseñanza”, apuntaron.

Frente al reclamo, el Consejo Escolar avisó que pondrá combis para trasladar a docentes y alumnos, aunque el temor es que se reduzca el tiempo de clases en el aula: “Los nenes solo tendrán dos horas de clases y a los docentes se le superpondrán los horarios”, advertía una mamá. Mientras una maestra pedía ayer: “Las escuelas del distrito se caen a pedazos. ¡Arréglenlas!”.