Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí

Enviar Sugerencia
Conectarse a través de Whatsapp
Temas del día:
Buscar

"A Little Love Package": todo lo sólido se desvanece como el humo de los bares

Gastón Solnicki muestra en el MALBA, los sábados, su último largometraje, una burbujeante comedia de peripecias que se expanden por Viena y más allá

"A Little Love Package": todo lo sólido se desvanece como el humo de los bares
18 de Marzo de 2023 | 01:44

“Muchos piensan que vivo en Viena”, se ríe Gastón Solnicki: en su nuevo largometraje, “A Little Love Package”, que se puede ver en el MALBA los sábados de marzo y que se encuentra presentando en Nueva York, el realizador de “Papirosen” e “Introduzione all’oscuro” regresa a la ciudad austríaca, un lugar donde, relata en diálogo con EL DIA, siente “resonancias” que le permiten sentirse en casa “a pesar de ni siquiera hablar el idioma”.

“Es una ciudad muy parecida a Buenos Aires. Buenos Aires tiene mucho de muchas ciudades europeas. Y hay algo muy familiar para mi, que tiene que ver con mis antepasados, que durante siglos vivieron en esa zona de Europa, algo del idioma, de la comida, de los rasgos”, dice Solnicki sobre la ciudad donde filmó sus últimas dos películas, y donde se encuentra proyectando una tercera.

Sin embargo, aquella primera cinta de la trilogía vienesa, “Introduzione all’oscuro”, es bien diferente a esta segunda, “A Little Love Package”. Aquella era un homenaje a su amigo Hans Hurch, fallecido habitante vienés, “una película muy urgente, muy espontánea”. Pero “después de filmarla, me quedé con ganas de hacer algo más ordenado, más desarrollado en Viena”, explica Solnicki: así nació “A Little Love Package”, donde la burbujeante ligereza de su estilo etéreo, alejado de los estándares rígidos de producción cinematográfica, permite continuar cruzando los límites del documental, la ficción y el ensayo.

La película comienza documentando las últimas horas de humo en los bares vieneses antes de que se prohíba fumar para siempre: realizador sin guion formal, Solnicki introduce allí a los personajes que encarnan Angeliki Papoulia, habitual colaboradora de Yorgos Lanthimos, y Carmen Chaplin, nieta del actor.

Como hace habitualmente, Solnicki organiza su cine “en torno a sus propias posibilidades”, filmando aquí y allá. La película fue rodada en pandemia, pero esa lógica recolectora de instantáneas, sin guion, permitió la supervivencia y, más, generó una “afinidad” entre el equipo, un “sentido de la hospitalidad”, que Solnicki siente “está muy presente en la película, esa energía de haber compartido una convivencia muy particular, en Viena, compartir las comidas, la vida”. 

Y en ese andar juguetón, la cinta viaja de Viena a Andalucía, mientras las historias de Angeliki y Carmen se entrecruzan con otras que se disuelven como ese humor vienés que ya no flotará en los cafés. Como “Introduzione all’oscuro”, su cine está invadido por los retratos de aquello que se van, desde los amigos hasta el mítico humo de los cafés vieneses. “A Little Love Package” opera como una especie de antídoto, una cápsula de tiempo ante varias cosas que parecen irse, incluida una forma de hacer cine. Pero a diferencia de “Introduzione”, su nuevo largometraje tiene un afán más peripécico.

 

- ¿La definirías como una propuesta más, llamémosle, narrativa?

 - Creo que ‘Introduzione’ tiene una capacidad para tocar ciertas fibras, interpela en un lugar muy íntimo, me pasó en distintas culturas, incluso en Corea del Sur. Cuando presenté la película allí, una señora universitaria, más de mi edad, empezó a hablar en coreano, y la interprete lloraba. Y pensé: ‘Rompimos a la traductora’, fue como un hito en mi carrera de presentaciones. La señora decía algo muy lindo, que escuché también en otros países, había muerto su padre, y conectaba muy fuerte con la posibilidad de un duelo alternativo, a partir de otras emociones que las tradicionales: la ternura, el humor, un signo incluso no trágico, una manera de relacionarse con la ausencia de otra manera. Es un poco lo que me pasaba a mi: no es que yo quería hablar de eso, filmar fue un acto ritual, una manera maníaca de duelar. Y filmé una película barroca, con archivo, fotos, elementos recolectados, más parecida a un ensayo; esta película, en cambio, es una película más narrativa, aunque no se si tanto más narrativa: hay una intención más ordenada, el impulso de salir a perseguir a unos personajes y salir a contar una historia, aunque no se cuente de manera tan convencional.

- Ahora, como en “Introduzione”, la película juega, deriva: seguís a tus dos personajes, pero a la cámara se le cruzan otros personajes, otras situaciones, y las sigue.

- Hay un prejuicio con lo que no es clásico: todo lo que se aleja es experimental y va hacia lo aburrido. Creo que no es verdad: hay una capacidad inherente de los niños de ser absorbidos por historias, y creo que muchas de las cosas que nos conmueven, culturalmente, comprobadas por el paso del tiempo, están llenas de fermentos, de digresión. Hay algo en eso que ofrece goce de manera natural. Pensaba en esto cuando me hablabas de esas capas que se abren: en este momento del mundo, donde todo se estandarizó tanto, y donde se perdieron tanto los oficios y las tradiciones que la película retrata y rescata. El capitalismo pone en valor todo eso a la vez que lo destruye, paradójicamente, ahora veo una apertura, incluso en adolescentes que por ahí no son cinéfilos, que no conocen más que lo pueden ver en Netflix, y tienen una sed de esas posibilidades inherentes del cine.

- Hablando de estandarización: la película comienza en los bares antes de que el humo fuera exiliado, y en un momento aparece una marca de cigarrillo en el marco, un guiño a otra era de las proyecciones, a una era que se va, que se fue…¿Dirías que hacés un cine que considerás nostálgico, que retrata lo que se fuga como se fuga ese humo?

- Yo soy optimista. Creo que hay una necesidad cada vez mayor por esas cosas elementales, que estuvieron todo el tiempo, el fuego, el color de la luz cálida… Vivimos en un momento donde se dan por sentado un montón de cosas, muy rápidamente. Se han dado de baja un montón de cosas, que quizás eran imperfectas… pero sigo creyendo en ellas. Las películas hechas como las hago yo, como las hace mucha gente, no en serie, van a seguir siendo necesarias, como son necesarios ciertos nutrientes para vivir. Además, creo que a pesar del momento terrible que viven los festivales y los cines, se va a remontar, porque el cine es una invención maravillosa realmente, no solo como práctica, como industria, sino también como ritual social. Creo que es uno de los grandes inventos de la humanidad: aunque sigan destruyendo los hermosos cines antiguos, las nuevas generaciones los volverán a levantar, porque es un gran programa. Ninguna era fue tan bien documentada por su propio arte como el siglo XX: eso el tiempo lo va a poner en marcha, sigo confiando mucho en el cine.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE a esta promo especial
+ Comentarios

Para comentar suscribite haciendo click aquí

ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES

HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS

Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales

¿Ya tiene suscripción? Ingresar

Full Promocional mensual

$670/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $6280

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Acceso a la versión PDF

Beneficios Club El Día

Suscribirme

Básico Promocional mensual

$515/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $4065

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Suscribirme
Ver todos los planes Ir al Inicio
cargando...
Básico Promocional mensual
Acceso ilimitado a www.eldia.com
$515.-

POR MES*

*Costo por 3 meses. Luego $4065.-/mes
Mustang Cloud - CMS para portales de noticias

Para ver nuestro sitio correctamente gire la pantalla