El Lobo le ofreció a Tarragona un nuevo contrato, mejorado, hasta diciembre de 2024

Su continuidad en Gimnasia es una de las posibilidades que por estas horas maneja Cristian Tarragona tras el fracaso que resultó la negociación entablada con Independiente, la cual paralizó el club de Avellaneda por las consideradas desmedidas exigencias del goleador, quien también aparece en el radar de Unión de Santa Fe.

La caída del pase de Tarragona al Rojo, dejó como saldo que en adelante las tratativas, en adelante, serán directamente con el futbolista, porque este anunció la ruptura con su representante, y en el caso del Lobo, su dirigencia le propuso renovar su contrato hasta fines del año 2024.

El goleador está ligado a la entidad albiazul de la calle 4 hasta el mes de diciembre próximo, aunque con una cláusula de rescisión fijada en 350.000 dólares, en principio dirigida a clubes del exterior, aunque Tarragona hace lo posible para aplicarla en el plano local.

El atacante santafesino de 32 años que llegó a Gimnasia procedente de Vélez, y en el conjunto Tripero ganó una notoriedad a partir de sus goles, estuvo en los planes de San Lorenzo, quien ocupó el puesto con Federico Girotti, y Unión, que está sumando refuerzos con el propósito de rearmar su equipo para cumplir una campaña que le permita asegurar la permanencia en Primera.

Tarragona quedó en foco ni bien terminó el torneo de la Liga Profesional, cuando a través de su cuenta personal de Instagram cruzó duramente a seguidores de Gimnasia que lo cuestionaron por su decisión de abandonar la institución haciendo valer la cláusula de rescisión.

En ese clima, negociadores del club albiazul llegaron a un principio de acuerdo con pares de Independiente para sellar el traspaso del goleador a cambio de 500.000 dólares, aunque una ruptura con su representante y diferencias de criterio en cuanto a las condiciones contractuales, hicieron que la negociación se frenara.

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Ni bien desde Avellaneda se hizo saber que el Rojo desistía de incorporar a Tarragona, Gimnasia le hizo llegar al futbolista un ofrecimiento para la renovación del contrato que tiene vigente hasta fin de año, con una mejora salarial y un nuevo vínculo hasta diciembre del 2024.

“Debido a pedidos incoherentes de Cristian Tarragona a última hora, Independiente desistió de su contratación”, anunció un vocero de Independiente antes que el propio futbolista anunciara en sus redes sociales que dejó de trabajar con “De 9 Fútbol”, la empresa de representación de Uriel Pérez.

Con este panorama, en el camino de Tarragona aparecen entonces Gimnasia, Independiente y Unión, aunque no se descarta que la lista tenga incorporado a otro equipo, y cada uno con sus fundamentos justifica cierto grado de optimismo para tener al goleador en la Copa de la Liga, que comenzará en un par de semanas y será importante porque definirá cupos para la Copa Libertadores, la Copa Sudamericana y sellará los descensos por la tabla acumulada y la de los promedios.

El Lobo se apoya en el contrato que tiene vigente con el futbolista y su adaptación al club, más la mejora económica que se le promete; Independiente, en el fondo, se ilusiona con reflotar la negociación que el miércoles a última hora se derrumbó; mientras que Unión, quiere hacer valer la condición de hincha que Tarragona manifestó en forma pública.