El kirchnerismo logró quorum en Diputados y aprobó paquete de leyes

El oficialismo, con el apoyo de partidos de izquierda, logró esta tarde el quorum necesario de 129 diputados para retomar la sesión en la cámara baja, luego de un cuarto intermedio, en la que se aprobaron cerca de 90 proyectos. 

El anuncio fue realizado por el titular de la Cámara, Julián  Domínguez, y hubo aplausos de todo el recinto. 

El diputado nacional por Tucumán  Benjamin Bromberg (FPV), primo del ex gobernador José Alperovich,  fue quien posibilitó esta tarde que el oficialismo lograra el  quorum.

Entre el paquete de leyes figura la expropiación del hotel Bauen, el sistema para repartir ganancias entre empleados telefónicos y las empresas, e indemnizaciones para ex trabajadores de firmas privatizadas.

El kirchnerismo estuvo a punto de ver naufragar la sesión especial como consecuencia del faltazo en masa de  la oposición, así como de ausencias propias, algunas sorpresivas.    

Tras la votación de la ley de creación de Yacimientos Carboníferos Fiscales, privatizada en los '90, como sociedad del Estado;  el oficialismo, que había comenzado la sesión con quórum ajustado, y con el respaldo de ocho legisladores de oposición (del FIT,  Unidad Popular, Libres del Sur y Proyecto Sur), tuvo que pedir un  cuarto intermedio.   

La razón del intervalo se debió a que los diputados peronistas riojanos Javier Tineo, Griselda Herrera y Teresita Madera, que estuvieron al inicio del debate, dejaron el recinto, sin explicación  alguna, e hicieron peligrar la continuidad de la sesión.    

Pero no fueron los únicos ya que también se había ido antes de  la votación la bonaerense Dulce Granados, se explicó que se  retiró porque tenía un compromiso familiar.    

Pero, también, es cierto que al oficialismo le faltaron desde  el comienzo 10 diputados propios y 4 aliados.       

De los propios, al inicio, le faltó el ultra-K Carlos Kunkel  (quien apareció para armar el quórum posterior), así como Andrés  Arregui, Gloria Bidegain, Carlos Gdansky, Omar Perotti (quien hizo  trascender su desacuerdo con la sesión y se expresó por una  transición ordenada), Oscar Romero, María Emilia Soria, José Antonio  Villa y Oscar Redczuk.    

De los aliados pegaron el faltazo cuatro de los seis integrantes del Frente Cívico por Santiago del Estero: Aída Ruiz, Mirta  Pastoriza, Graciela Navarro y José Herrera; así como los ex  renovadores Darío Giustozzi y Sandro Guzmán.   

Para rearmar el quórum, el oficialismo tuvo que recurrir a la  peronista bonaerense Gloria Bidegain y al tucumano Isaac Benjamín  Bromberg (primo del ex gobernador José Alperovich), quien en  realidad había estado al comienzo de la sesión pero luego se ausentó y  hubo que localizarlo para que volviera al recinto.     

Una vez que llegó Bromberg al recinto se pudo destrabar la  situación y se retomó la sesión.  

Al finalizar la sesión, el presidente de la cámara, Julián Domínguez, se despidió del cuerpo, ya que el 9 de  diciembre vencerá su mandato.    

En su último mensaje, Domínguez apuntó que "no nos sorprende las dificultades" que hoy el oficialismo tuvo para conseguir el  quórum, pero destacó que "si hay algo de lo que nos podemos sentir  orgullosos y junto a la comunidad de trabajadores es que nunca este  Congreso votó una ley en contra de los intereses del pueblo  argentino".    

Tras su despedida, los diputados y la barra, en su mayoría  trabajadores telefónicos que ocuparon los palcos, entonaron la marcha  peronista.    

En ese momento, la jefa de la bancada kirchnerista, Juliana Di  Tullio, pidió la palabra para transmitir "el agradecimiento" del  bloque y destacar "que le ha devuelto la dignidad a este  Parlamento".