Un intendente no quiere más el bingo en su municipio

El intendente de San Miguel, Joaquín De la Torre, sorprendió ayer con un anuncio en la apertura de las sesiones ordinarias del Concejo Deliberante: adelantó que le pidió a la gobernadora María Eugenia Vidal que cierre el bingo que opera en el distrito.

Entre otros anticipos, el jefe comunal -que empezó a tomar distancia del Frente Renovador de Sergio Massa, blanqueó que pidió a las autoridades provinciales terminar con el “flagelo” del juego en la Provincia. Y en ese contexto, reclamó el cierre del bingo que el grupo Codere opera en la comuna del oeste del Conurbano.

El planteo de De la Torre contrasta con la polémica discusión que tiene como epicentro la municipalidad de Lomas de Zamora, donde empresarios del juego están impulsando la mudanza del bingo a la zona de Puente La Noria, una de las zonas de mayor vulnerabilidad social del Conurbano.

Esa movida cosechó el rechazo de buena parte de la sociedad y está generando un pase de facturas entre los distintos sectores políticos bonaerenses por el padrinazgo del emprendimiento y sus consecuencias.

TRASLADO

La empresa Codere planificó el traslado del bingo de Temperley (uno de los más pequeños de la Provincia) hacia ese lugar donde transitan a diario 250.000 personas y levantó desde 2010 un edificio para albergar la que se prevé podría ser la mayor de sus salas de juego.

Aprovechando una rezonificación otorgada por el Concejo Deliberante para la instalación de locales en una terminal de larga distancia, Codere inició un expediente en el Instituto Provincial de Lotería y Casinos pidiendo el cambio de sede para la licencia del bingo Temperley.

Según contó, el diputado provincial por el GEN Marcelo Díaz, la sola lectura del expediente da cuenta del impulso que la administración del entonces gobernador Daniel Scioli dio al proyecto. El legislador también fue crítico de la posición del municipio local, que “no sólo no es ajeno” al tema sino que “le entregó la habilitación definitiva al nuevo edificio”.

Con el correr del tiempo, el proyecto obtuvo el rechazo de todo el espectro social y político. Todos señalan al obispo de Lomas Jorge Lugones como el principal opositor a la iniciativa.

Desde que se produjo el recambio en la gobernación bonaerense, el expediente en cuestión “no tuvo movimientos”. El dato es clave porque debe ser aprobado por el Instituto de Lotería.