Otra renuncia hace temblar al nuevo gobierno de Brasil
| 5 de Junio de 2016 | 02:58

BRASILIA.- Un nuevo ministro (el tercero) del gobierno provisorio de Michel Temer, el abogado general de la Unión Fabio Osorio, dejará su puesto mañana, según trascendió en medios de prensa brasileños agravando la crisis política que atraviesa el país.
De acuerdo a distintos medios, el mandatario interino decidió alejarlo del cargo –equivalente al de una secretaría de estado técnica- por “conducta indebida” ante militares de la base aérea de Curitiba, la capital de Paraná. El nuevo episodio que afecta el gabinete de Temer se reaciona con el intento de Osorio de utilizar un avión de la Fuerza Aérea para un trámite personal.
Pese a que su pedido fue rechazado por los militares, el funcionario argumentó que su cargo es el equivalente a un ministro, lo que generó las quejas de los mandos de la Aviación, que llegaron al oído del propio mandatario, quien decidió desprenderse desde mañana de su colaborador, pese a que tenía el respaldo del poderoso ministro coordinador Eliseu Padilha.
De esta forma, el nuevo alejamiento se suma a las renuncias de los ahora ex ministros de Planificación, Romerio Jucá (quien volvió al Senado) y de Transparencia Fabiano Silveira, quien dio consejos a políticos sobre cómo eludir la justicia en el caso de las coimas de Petrobras.
MAS PROBLEMAS
Pero no es el único problema por el que pasó Temer en las últimas horas. El ex senador brasileño Sergio Machado, ex presidente de una subsidiaria de la estatal Petrobras, detalló en su testimonio ante la Justicia el pago de sobornos por 70 millones de reales (20 millones de dólares) a tres altos dirigentes del partido del presidente interino.
Las confesiones del delator, en el testimonio que rindió tras llegar a un acuerdo con la Fiscalía para colaborar en la investigación del escándalo de corrupción en la petrolera estatal a cambio de reducción de sus condenas, fueron filtradas por algunos diarios brasileños que dijeron haber tenido acceso a los documentos.
Machado detalló los pagos que hizo al presiente del Senado, Renán Calheiros, al expresidente brasileño José Sarney y al senador Romero Jucá, que fue nombrado por Temer ministro de Planificación pero tuvo que renunciar al cargo a los pocos días tras la divulgación de las primeras denuncias del delator.
El ex presidente de Transpetro, la subsidiaria de Petrobras responsable del transporte de crudo y derivados, afirmó que los sobornos que recibió por favorecer a grandes empresas con millonarios contratos de la estatal fueron distribuidos entre los miembros del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) que lo indicaron para el cargo y lo ayudaron a permanecer 13 años en el comando de la empresa.
Machado fue nombrado presidente de Transpetro tras la llegada al poder de Luiz Inácio Lula da Silva en 2003 y se mantuvo en el cargo hasta 2015, primer año del segundo mandato de la presidenta suspendida, Dilma Rousseff, cuando renunció por las denuncias de que participó en la red que desvió recursos de Petrobras.
De acuerdo con el delator, Calheiros recibió 30 millones de reales (unos 8,6 millones de dólares), Sarney 20 millones de reales (unos 5,7 millones de dólares) y Jucá otros 20 millones de reales de los sobornos que recibió por la adjudicación de contratos de Transpetro.
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