Gustavo cerati: dos años de ausencia de un artista infinito

Dos años que parecen una eternidad: ayer se cumplieron 24 meses sin Gustavo Cerati, quien fallecía un 4 de septiembre de 2014 tras permanecer en coma durante cuatro años, tras un accidente cardiovascular sufrido en Venezuela en 2010, y su ausencia se siente en una escena nacional cada vez menos armada de talentos musicales capaces de deslumbrar, jugar siempre al límite y adelantar tendencias.

En el segundo aniversario de su muerte, entre las muchas voces que se alzaron en las redes sociales bajo el hashtag #CeratiEterno para recordar al mítico líder de Soda Stereo y compartir su obra, la que se destacó fue la palabra de Lilian Clark, la madre de Cerati, que recordó al rockero argentino como un “apasionado” y “muy bien formado” músico.

“Para mí es un día más porque Gustavo está acá, en esta casa, siempre presente, así que simplemente es un aniversario más”, dijo Lilian en declaraciones a Radio 10, de buenos Aires.

Clark recordó a su hijo como un niño que creció a su lado y que un día le dijo que él iba a ser músico, lo que hizo “temblar” a su madre porque le imaginaba tocando la guitarra en el metro.

IDOLO AMERICANO

“Gustavo cumplió su sueño. Decidió ser lo que fue”, señaló. La madre del artista destacó la huella que Cerati dejó en Latinoamérica y afirmó que no cree que haya habido otro músico que lograra “tanta proyección” en la región.

“Pegó fuerte en toda Latinoamérica. Era muy sencillo, muy amplio, de una mente muy abierta, estaba muy bien formado, le gustaba leer mucho”, contó la mujer, que definió a su hijo como “un apasionado por lo que hacía”.

“Se fue joven, lamentablemente. Varios años estuve cuidándolo, pero no hubo nada que hacer. Estuvo todo el tiempo agarrándome la mano y lo mismo con sus dos hijos. Así que yo apostaba a que iba a salir, pero fue inútil”, dijo Clark, quien estuvo junto a Cerati durante sus cuatro años de convalescencia.

Lilian disparó además que en aquella noche venezolana donde Cerati se desvaneció y pasaron horas hasta que lo atendieron “hubo mala praxis, pero ya no vale la pena investigar”.