El temor por la inseguridad se extiende por distintos barrios: hubo otra entradera

La Plata forma un gran conglomerado social, con zonas que se distancian de otras por razones fundacionales, urbanísticas, comerciales y hasta habitacionales. Pero donde no se nota tanto esas diferencias es en el reclamo contra la ola de inseguridad, que se extiende con igual fuerza e intensidad por los distintos barrios de nuestra ciudad.

Con sólo decir que en las últimas horas hubo una entradera en La Loma, un asalto en pleno centro o un robo en una vivienda de Tolosa, estamos dando algunas muestras de la grave situación que, a gritos, vienen denunciando los vecinos. Y por la que reclaman urgentes soluciones a la Policía.

Ya eran las 10 de la noche del jueves cuando un hombre, que vive en la calle 36 entre 28 y 29, donde estaba la esposa y una hija de 15 años, quedó a merced de dos delincuentes armados.

Por el simple hecho de cumplir con la rutina de guardar los autos en el domicilio familiar, vivieron un momento desesperante.

Según relató ayer a este diario Roberto Cavallero (50), una de las víctimas, ya había ingresado el coche de su mujer cuando fue a buscar el suyo. Pero en su trayecto se interpuso un desconocido, que lo hizo desistir rápidamente de sus planes y habilitó a un cómplice para que se sume a la terrible escena.

“TIRATE AL SUELO”

El dueño del inmueble le contó a EL DIA que antes de que llegara el otro asaltante, “el que me apuntaba me dijo `tirate al suelo`. Igual no le hice caso. Y enseguida me pidió que me quedara tranquilo”.

“Ahí fue que llegó el cómplice, que tenía puesto un casco de moto en la cabeza. Y no tuve más alternativa que meterme adentro con ellos”, agregó.

Cavallero admitió que en ese instante de incertidumbre “me puse nervioso por lo que podía pasar, ya que se encontraban mi mujer y mi hija más chica, de 15 años”.

Mientras el asaltante que portaba el arma se quedó con el dueño de casa, el otro ladrón se dirigió a los dos dormitorios.

En tal sentido, Cavallero hizo saber que “en el cuarto donde estaba mirando televisión mi hija, el tipo abrió la puerta y ella pensando que era yo gritó que tuviera cuidado que no se escape el perro”.

“Pero el delincuente se asomó más que nada en el cuarto, pero sin que mi hija lo viera”, reflejó.

Muy distinto fue lo que pasó en la otra habitación, donde se hallaba la esposa.

Al respecto, destacó que “mi mujer me había comentando que pensaba darse una ducha. Pero como se encontraba muy cansada, se quedó media dormida”.

Hasta que el intruso “la despertó, la zamarreó de un brazo y en más de una ocasión le gritó `dame la plata, hija de p...`. aunque no sé bien todavía qué le habrá dicho mi mujer, pero plata no se llevó”.

En cambio, puntualizó que “escaparon con un televisor LCD de 32 pulgadas, una notebook y dos teléfonos celulares”.

“ESTUVIERON 3 MINUTOS”

Cuando se lo consultó sobre cuánto tiempo permanecieron en su casa, el hombre precisó que “unos tres minutos. Y por suerte no nos golpearon, ni nos ataron”.

Apenas ambos ladrones salieron de su casa con el botín, Cavallero siguió sus pasos. Y así observó que “se fueron en una moto que estacionaron a 30 metros”.

Luego llegaron tres patrulleros, dos de los cuales salieron a buscar a los asaltantes. “El restante móvil se quedó con nosotros. Pero pese a que la Policía montó un operativo para dar los motochorros, finalmente se les escaparon”.

En tal sentido aludió a que “esta zona ofrece a los delincuentes salidas rápidas para ir a otros sectores de la Ciudad. Y mucho más cuando se movilizan en moto”.

Cavallero mencionó a su vez que “esta mañana (por la de ayer) fui a la comisaría cuarta y radiqué la denuncia”.

Por otra parte, el hombre comentó que “es la primera vez que sufrimos un robo en los ocho años que llevamos en este barrio”.

Aunque como se viene dando a conocer desde estas páginas, la inseguridad en La Loma sigue siendo noticia.