¿La final de un Mundial?

Por SERGIO SOIRIFMAN

Desde el mismo momento que finalizó el partido ante Perú con un empate, la Selección se convirtió en el tema preponderante en los medios de prensa y en cualquier rincón de la Ciudad. Y se mencionó reiteradamente que el de hoy es como la final de un Mundial. Nada que ver. Llegar al último partido de semejante cita deportiva es lo máximo, para ello se pasó por seis encuentros cargados de tensión, de cierto dramatismo, pero de mucha alegría final. Jugar la final de un Mundial de fútbol es lo máximo y lo querés ganar. Si lo perdés, como ya ocurrió con Argentina, te queda el orgullo de haberlo disputado, aunque Carlos Bilardo haya instaurado que ser segundo no sirve de nada.

En el partido de hoy está en juego muchísimo más que la final de un Mundial. Ni se compara. Hoy nos jugamos la posibilidad de ir a Rusia o de seguir teniendo chances de clasificar. Hoy nos jugamos todo para después poder disfrutar de un Mundial. O también hoy mismo podemos terminar hablando de fracaso total.

Nadie se atreve a pensar que quedamos afuera de Rusia. Todos hablan de que “vamos a ganar”. Es como que está prohibido ser pesimista. Y en realidad si se da la lógica, Argentina tiene más chances de quedar afuera que de entrar a Rusia 2018. Porque se hizo una pésima Eliminatoria, porque no hubo una conducción acorde a lo que necesita un Seleccionado con la jerarquía del nuestro. Porque no le pudimos ganar a Venezuela ni a Perú en las dos últimas fechas, cuando en realidad ambas selecciones siempre estuvieron muy por debajo del nivel de la nuestra. Hoy Messi, sí Messi, el mejor jugador del Mundo, se puede quedar sin ir a Rusia. Sería un golpe durísimo. Y quizás todo el plantel lo sentiría, pero el que más dolor sufrirá será el hincha argentino. Ellos, los jugadores, se irán, la mayoría a los países donde están jugando, y en horas olvidarán semejante golpazo. Y hasta programarían con sus familias unas largas vacaciones para cuando se esté disputando el Mundial. El argentino, especialmente el hincha de fútbol, seguirá dolido hoy y por siempre. Esperemos que la Selección nos dé la mayor alegría de los últimos tiempos. La de seguir soñando con verla en Rusia.