Cansados de pedir soluciones, en un barrio apelan al ingenio para atraer la atención comunal

Los vecinos no descansan para hacer reclamos llamativos que tiendan un puente más directo a la solución. Cansados de reclamar por las vías formales y administrativas, en City Bell recurrieron a una cartelería para pedir un diálogo directo con el intendente Julio Garro que les permita encontrar una solución para el arreglo de los accesos al barrio, reparar los desagües pluviales y mantener una plaza que está abandonada.

Desde el Municipio, en tanto, aseguraron que esta semana el intendente se reunió con vecinos de barrios cercanos en City Bell para dialogar y escuchar sus reclamos. A su vez, plantearon que las falencias estructurales de amplios sectores de la periferia son consecuencia del crecimiento sin planificación de los últimos años (ver recuadro).

En la zona de 467 a 476 y de 155 a 160 los vecinos llevan años pidiendo una batería de medidas para mejorar el barrio. “El único acceso disponible es la calle 155, que es una media calzada, y que es utilizada como entrada de servicio por el barrio cerrado Lomas de City Bell. La calle 158 intransitable. La plaza en estado de abandono. El curso de aguas no permanentes que atraviesa el barrio produce anegamientos con cada lluvia por falta de obras de canalización y zanjeo”, describe uno de los vecinos afectados.

Hartos de no ser escuchados, colgaron un enorme cartel para llamar la atención del “vecino (Julio) Garro, Necesitamos hablar con usted”. El cartel está ubicado en 467 y 155, y los vecinos aguardan una respuesta del intendente para solucionar todos los inconvenientes que tienen en el lugar.

Los vecinos de City Bell se sumaron a una larga lista de movidas llamativas para buscar una solución a diferentes problemas.

CON RECLAMOS LLAMATIVOS

Un hombre que llevaba varias horas sin luz se presentó en Edelap con la intención de “darse una ducha”, porque la falta de energía en su hogar lo había dejado sin agua; y una cliente de la misma empresa fue a “dormir” a esa sede, justamente, por el mismo inconveniente. En La Loma, un jubilado se sentó a “pescar” en la laguna que se formó a la altura de su sector de la vereda una cañería rota de la red de Absa mientras que vecinos de distintos barrios llegaron a festejar un Carnaval “seco” en Plaza Moreno, a principios de este año, debido a las distintas fallas que sufren con los suministros domiciliarios.

En 2014, una creativa protesta que se reeditó en 2016, fue aplaudida por los automovilistas que les tocó, en esa oportunidad, recorrer un tramo de la ruta 11, camino a Magdalena, ganado desde varios años atrás por profundos baches. Los vecinos de la zona rodearon los pozos de la calzada asfáltica con coloridos dibujos y manifestaron de ese modo su disconformidad por el mal estado del pavimento en un sector de intenso tránsito vehicular.