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Edición Impresa | 9 de Noviembre de 2017 | 02:22

Empresas privatizadas
Fannina Mía Ferrero sostiene: “Cuando se privatiza una empresa, la que ha sido ineficiente, los empleados son beneficiados con todo tipo de prebendas, que, bueno es remarcarlo, son en su gran mayoría salidas de nuestros bolsillos, es decir de los contribuyentes.
Tengo la certeza de que son esos mismos trabajadores, y sobre todo los políticos, los seguramente colaboraron en la ineficiencia de la empresa a ser privatizada. Pero, a la hora de pasarla a manos privadas, a los que permitieron la ineficiencia, se los jubila anticipadamente, se los indemniza y se reparten las acciones de la empresa, conjuntamente con los sindicatos.
Empresas que quizás fueron creadas por nuestros ancestros para beneficio de todos los ciudadanos, hoy, después de vaciarlas y reventarlas, se reparten el botín entre el Gobierno, los empleados y los gremios.”
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