Dan a conocer video del comisario abatiendo a los dos jóvenes en 44 y 150
| 9 de Marzo de 2017 | 23:09

Domingo 5 de marzo. 21 horas, 43 minutos, 51 segundos. La cámara de seguridad del supermercado El Nene, de 44 y 150, comenzó a grabar la terrible secuencia, que terminó con dos jóvenes heridos de muerte a balazos. ¿El autor de los disparos? Un comisario retirado, que había ido a realizar una extracción de dinero a un cajero automático situado al lado del comercio.
Primero se ve a un remís blanco con las balizas encendidas, cuando los dos motociclistas llegan al lugar por detrás.
Uno de ellos se bajó del rodado, presuntamente con intención de asaltar al chofer, pero este aceleró y logró zafar del inminente robo.
El que no pudo evitar a los presuntos ladrones fue el ex policía, a quien habrían elegido como nuevo blanco y amenazaron con intenciones delictivas.
En ese instante, 21 horas, 44 minutos, 17 segundos, luego de identificarse, empezó la balacera.
En el margen superior del video, sobre el centro de la imagen, levemente recostado hacia la derecha y en posición de tiro, R.A.D. comenzó a gatillar su Glock .40 cuando los motociclistas intentaban escapar. Hubo ocho fogonazos en total.
Los resultados fueron inmediatos. Los dos jóvenes quedaron tendidos sobre el pavimento a unos pocos metros, uno de ellos, el conductor, que fue identificado por las fuentes como Iván Barboza (26), ya sin vida, con un disparo que le atravesó la cabeza.
Gerónimo Rojo, el acompañante, murió horas después, cuando era asistido en el hospital de Romero, por una afección de la arteria aorta.
La fiscal que investiga el caso, Betina Lacki, se acercó a ese sector del barrio El Retiro, donde analizó en detalle la escena y obtuvo una vaina calibre 45, que se condice con una de las armas que llevaban los jóvenes -había otra calibre 9mm-.
La evidencia, entonces, refirió la existencia de un disparo hacia el comisario retirado, cuya respuesta, para la funcionaria judicial, no configuró el extremo de la legítima defensa y, ni siquiera, se pudo tomar como un exceso en la forma de repeler esa agresión.
Directamente entendió que R.A.D. fue autor del delito de homicidio y le pidió la detención.
Sin embargo, el juez de la causa, Guillermo Atencio, no compartió ese criterio y lo liberó, al creer que sí se defendió de un ataque que puso en riesgo su vida.
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