Espacios eclécticos

Edición Impresa

El eclecticismo no significa un vale todo a la hora de decorar. Nunca hay que perder el equilibrio. La tendencia actual marca que no hay que seguir una regla y por eso es que este estilo ha ido ganando su lugar por basarse, precisamente, en no regirse por las pautas de tal o cual línea estética.

Se trata, dicen los especialistas, de permitirse fusionar muy bien la funcionalidad, los intereses culturales y costumbristas con joyas antiguas que la persona quiera conservar.

El peligro de esta tendencia es caer en excesos. Para eso, ofrecemos algunas pautas para ponerlo en práctica en nuestros ambientes sin miedo a equivocarnos.

Según los interioristas, lo ideal es encontrar una pieza que nos encante y basar el resto de la decoración en torno a ella

 

Según los interioristas, lo ideal es encontrar una pieza que nos encante y basar el resto de la decoración en torno a ella. Puede ser un tapete persa, una mesa de comedor o incluso una obra de arte.

Es fundamental, también, elegir bien la paleta de colores que marcará la decoración. Lo más importante para conseguir que un espacio tenga armonía son los colores, ya que brindan cohesión a la decoración. Aún cuando se mezclen varios estilos, la habitación tendrá equilibrio si los colores van bien entre sí. No te quedes con una sola gama, mejor elige un tono principal y combínalo con colores contrastantes y otros neutros.

A pesar de que la decoración ecléctica está basada en la combinación de mobiliario de distintas épocas y con estilos variados, siempre tiene que haber uno que predomine. Por ejemplo, una habitación con un armario, una cómoda y un sillón de la era victoriana, agregando solamente una silla rústica.

Los elementos que usas para adornar tu casa dicen mucho de quién eres. En la decoración ecléctica no hay que tener miedo a mezclar adornos distintos, con diseños y texturas variadas y, mejor aún, provenientes de diferentes partes del mundo.

El mix & match no solo se aplica al mobiliario, sino también a las obras de arte. Está bien combinar piezas de distintos estilos y corrientes, siempre y cuando se coloquen siguiendo una jerarquía de escala y proporción. Aquí no hay que basarse en los colores de la pintura o el tipo de marco, sino en el simbolismo de cada obra, para lograr una conexión entre las piezas.

Así como los colores unifican y armonizan un espacio, las texturas atraen la atención a los detalles, más allá de la primera impresión. Las texturas siempre aportan vida y calidez a una habitación.

El que una habitación tenga un estilo ecléctico no quiere decir que deba estar saturada. No se trata de mezclar de todo un poco sin pensar, sino de elegir cada elemento cuidadosamente para lograr armonía y balance.

En la decoración ecléctica, la idea es rodearse de piezas especiales. Al elegirlas, es fundamental que cada una tenga un significado importante para ti. Después podrás encontrar su lugar ideal dentro del hogar.

Al decorar un espacio, hay un detalle muy importante, y que muchas veces no atendemos: el color de las cortinas. En una habitación ecléctica, lo mejor es que las cortinas sean de un solo color. En este caso, no se recomienda usar patrones o texturas, porque romperán con la armonía del diseño interior.

La decoración de una casa debe de ser algo divertido y no estresante. Es un cometido que toma tiempo y que nunca termina, porque siempre puedes agregar nuevas piezas para renovar los espacios. Disfruta de este proceso y llévalo paso a paso.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE