Investigan ataque mafioso con gas lacrimógeno en un súper chino

La Policía y la Justicia platense sumaron una nueva línea a las investigaciones delictivas en la Ciudad: el accionar de una presunta organización con códigos mafiosos, vinculada a los supermercados chinos. Todo empezó ayer, con un extraño ataque ocurrido por la mañana dentro de un comercio con dueños asiáticos, en cercanías del parque Castelli, donde un sujeto encapuchado arrojó una granada de gas lacrimógeno para escapar luego a la carrera.

El episodio se produjo minutos después de las 9, en 65 entre 28 y 29, en momentos en que, según se informó a este diario en el barrio, se encontraban únicamente la dueña del negocio y algunos empleados.

El responsable de lo que se analizó como un atentado, una vez que logró su propósito, rápidamente se dio a la fuga antes de que pudiera ser retenido en el negocio o alcanzado por los efectos del gas lacrimógeno.

Ocasionales testigos informaron a este diario que “apenas se fue el tipo encapuchado, la dueña y por lo menos un empleado salieron a la calle con su vista ardiendo por haberse esparcido el gas por todo el comercio”.

Momentos después se dio aviso al 911 sobre la situación en el lugar y a los pocos minutos arribaron a la escena dos patrulleros y dos motos con efectivos policiales.

De inmediato se cruzó uno de esos móviles en la esquina de 65 y 28, para cortar el paso de vehículos por la cuadra, mientras que además se precintó la zona de acceso a dicho comercio.

Asimismo, como parte del operativo policial, se salió a buscar al autor del ataque, pero sin que pudieran encontrarlo.

La presencia de los uniformados en el lugar estuvo hasta el mediodía, ante la atenta mirada de un grupo de vecinos del barrio que se mostraban desconcertados.

Algunos, creyeron inicialmente que se había cometido un asalto en ese negocio, pero quedaron más sorprendidos al enterarse sobre lo que realmente había sucedido.

“Mafia china, sin duda. Y a escala local”, indicó una fuente de la investigación tras las primeras actuaciones a cargo del fiscal Juan Cruz Condomí Alcorta (UFI Nº 16). Los pesquisas se manejaban con reserva con respecto a los motivos del ataque y los alcances de la organización, que en esa hipótesis tendría acotado su actuación territorial al ámbito de la Ciudad. En los primeros tramos de la tarea se menciona incluso a dos grupos en pugna (identificados con colores), pero con la misma modalidad: extorsionar a los comerciantes.

“POLICÍAS SALÍAN LLORANDO”

Mauro Battistossa (40), vecino de la cuadra, contó que “la granada la tiraron adentro del supermercado”. Según apuntó, fue tan importante el enrarecimiento del aire que “cuando ingresaron policías para ver si estaba el tipo que tiró la granada, luego salían hacia la calle llorando por el efecto del gas”. El testimonio de otra vecina fue en la misma dirección de los pesquisas: “una mujer que vive en esta cuadra me contó que a las 7 y media de la mañana salió a la calle y vio que frente al supermercado había un desconocido con su rostro encapuchado”. “Parecía que estaba esperando que abran para hacer lo que más tarde hizo”, acotó. Yamila (21), empleada de una agencia de loterías de la cuadra, señaló que “me comentaron que el que tiró la granada lacrimógena estaba solo.

Una vecina de la cuadra vio que, a las 7.30 de la mañana, un encapuchado estaba frente al local