“Cavalo Dinheiro”, gran cinta de Pedro Costa, se verá en la Ciudad

El filme “Cavalo Dinheiro”, del portugués Pedro Costa, se podrá ver por primera vez en la Ciudad en el marco del ciclo Videodromo, que la proyectará en el Cine Select, el próximo lunes a las 19.30.

La película del realizador lusitano narra duros sucesos de la vida de un inmigrante caboverdiano del antiguo barrio obrero Fontainhas de Lisboa, en un filme alejado del cine narrativo y argumental y volcado mucho más hacia una vertiente poética que, no por eso, desconoce la fuerza del discurso político cuando sabe hacer trama con el arte.

Situada en un lugar extraño, casi una extranjería, en lo que podría ser un hospital de la década del 60 y a veces unas catacumbas, “Cavalo Dinheiro” nunca decide si se encuentra en un plano de realidad o de fantasía o, mejor dicho, hace del discurso poético, la elipsis y la metáfora su materialidad indestructible.

Para narrar entre recuerdos y una posible muerte cercana la vida de Ventura, un inmigrante caboverdiano que llegó a Portugal a los 17 años (entre fines de los 60 y comienzos de los 70) escapando a la persecución política de su país, y en Lisboa se convirtió en albañil y habitó uno de los barrios obreros e inmigrantes de bella ciudad a orillas del Tajo.

Recuerdos, visiones posibles del pasado, personajes que vuelven, como la mujer que quedó en Cabo Verde o la tierra que hubo que vender para pagar el viaje; registros administrativos de la morgue, un acta de defunción o una partida de nacimiento, una carta escrita a la Embajada con motivo de la muerte de un nacional; una extensa charla con un soldado que posa como estatua viviente dentro de un ascensor y rememora la Revolución de los Claveles de 1974, son algunos de los fragmentos con los que Costa va construyendo un discurso sobre un barrio, una clase y unos migrantes en lucha a muerte contra las duras condiciones que impone el capital.

Esto, en el marco de una película en un punto dura, exigente con el espectador, plagada de tiempos quietos, casi inmóviles, y también con bellas imágenes fotografiadas a la manera de cuadros de interiores con fuertes juegos de luz y sombra.