Un condenado por balear a dos policías, complicado por un chaleco policial

En la vivienda donde fijó domicilio para las salidas fue secuestrado un chaleco antibalas que se usó en un robo reciente a una pizzería

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Un hombre que cumple una condena a 22 años de prisión por balear a dos policías -provocándoles graves lesiones a que uno lo dejaron en una silla de ruedas- fue detenido ayer por policías que buscaban a un prófugo acusado de una secuencia de dos robos de autos y el asalto a una agencia de lotería situada en 137 y 33. Al recluso lo vinculan con el hallazgo de un chaleco antibalas de la Policía en el allanamiento a la vivienda en la que fijó domicilio para las salidas transitorias mientras purga esa condena.

Miguel Angel Villaba, de 34 años, fue llevado a juicio por tentativa de homicidio en contra del sargento Miguel Ángel Cabello y el teniente Miguel Agnonelos, cuando intervinieron en un intento de robo a un corralón de materiales de san Carlos, en enero de 2008.

A diez años de aquel episodio cuenta con salidas transitorias de 48 horas mensuales. Ese beneficio fue dispuesto por el Juzgado de Ejecución Penal Nº 1, a cargo del juez José Villafañe.

Una fuente del tribunal informó ayer que Villalba cumplió con los alcances de la primera salida, del 2 al 4 de julio y esta semana le tocó la segunda. La estadía, fijada en una casa de 530 entre 144 y 145 fue interrumpida por el operativo policial. La subcomisaría de La Unión informó que esa vivienda estaba en la lista de las órdenas de allanamiento impartidas por la UFI 8 (Hugo Tesón) y el Juzgado de Garantías Nº 4 (Juan Pablo Masi) en la investigación del asalto a una agencia de lotería en medio del robo de dos autos, ocurridos el pasado 21 de julio.

No estaba allí el acusado y el preso que cumple su condena en la Unidad 1 de Olmos fue involucrado con el chaleco que presentaba la numeración borrada y trasladado a la comisaría, por la presunta infracción al Artículo 289 del Código Penal.

Entre los policías de La Unión y otras comisarías vecinas no ocultaban sorpresa por toparse por Villalba y bronca por el beneficio que se le concedió a una década del episodio por el que fue condenado. Esos policías todavía recuerdan a los efectivos heridos, que pasaron a retiro con lesiones graves.

Desde el tribunal a cargo de Villafañe se aclaró que el beneficio de las salidas le fue concedido en el marco de lo que establece la normativa, al cumplirse la mitad de la condena. Según se indicó, Villalba está bajo la tutela de un hermano en estos periodos fuera de la prisión.

Otra fuente del sistema judicial apuntó que “estas opciones de libertad transitoria conducen a la posibilidad de la condicional, al llegar a los dos tercios de la condena, pero esto no es automático. El juez tiene la facultad de otorgarla en función de una serie amplia de indicadores”.

Desde la comisaría se indicó que el chaleco en cuestión “forma parte de la investigación de un hecho cometido en una pizzería en La Loma que fue documentado por un oficial de la seccional al cruzarse con los ladrones, que iban en moto”. Desde el tribunal de Villafañe, se aclaró que ninguno de esos episodios ocurrieron en momentos en que Villalba estaba fuera de la cárcel.

 

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