El Lobo lo aprendió: los partidos se ganan y se pierden en las áreas

Edición Impresa

Por WALTER EPÍSCOPO

wepiscopo@eldia.com

Se sabe que en los partidos de pretemporada los resultados no importan demasiados, sino que lo importante es ir encontrando un buen funcionamiento. Durante esos ensayos, Gimnasia había mostrado buenos momentos ante Defensa y Justicia y Lanús, por ejemplo (que se pudieron ver), y sin embargo había perdido. En esos momentos más allá del resultado en contra, desde este mismo espacio resaltamos la actitud del equipo. Que había una idea de juego. Un plan a desarrollar.

Eso de la presión bien arriba al rival. Tratar de salir rápido por los costados. Las sociedades. En esos partidos no tuvo gol aunque generó chances. Falló en la puntada final. Al mismo tiempo, sufrió goles totalmente evitables, por desatenciones defensivas, y esto no quiere decir solo de los defensores. En ese momento resaltábamos que el Lobo debía aprender de esas lecciones, sino para qué esos ensayos ¿no?

Y ante Patronato al menos lo aprendió. Ganó bien. De manera clara y contundente, el 3-0 así lo indica. La clave fue haber estado más “fino” en las dos áreas. En la propia, la defensa no tuvo prácticamente fisuras. Goltz y Coronel en la “cueva” nunca dudaron; los laterales Weigandt y Melluso estuvieron firmes en la marca y rápidos para resolver. Si incluimos a Broun, claro claro le llegaron una vez y la sacó volando con una mano. Fue una atajada importante, el Lobo solo ganaba 1-0 y moría el primer tiempo.

En el área de enfrente, tanto el gol de Coronel (el 2-0) como el de Ramírez (3-0), fueron claramente por una buena acción Tripera; en la apertura del marcador, si bien Sappa “colabora” (y mucho) en el gol de Carbonero, también fue de tanto buscar. El arquero venía de sacarle un tiro tremendo a Ayala que antes había estrellado un cabezazo en el travesaño. Matías García tuvo una muy buena tarea por izquierda; Carbonero exigió por derecha también.

Gimnasia hizo méritos para ganarlo y lo hizo. Fue práctico ante un rival muy flojo, pero eso no desmerece la victoria. Si bien el triunfo nunca corrió peligro en el fútbol nunca te podés relajar. Precisamente con Patronato en febrero pasado ganaba tranquilo 1-0, y en una pelota aislada (tras el penal que encima erra Barrios), los entrerrianos lo empataron. Gimnasia hizo lo suyo y lo ganó bien. No falló ni en el área propia ni en la de enfrente. ¿En el medio? Mancilla, Ayala y Caco García son tres actores principales que saben lo que deben hacer y nunca desentonan. Cuando “conectó” por momentos Pérez García, fue mucho mejor aún.

En una jornada cargada de emociones por los 60 años de Diego, el equipo pudo abstraerse de todo ello y mantuvo su objetivo firme de salir y ganar en el debut, lo que hizo con un 3-0 sin dejar dudas. Y no es poca cosa.

 

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE