Buscan a los dos “polichorros” que en furioso enfrentamiento huyeron por el arroyo El Gato

Con armas 9 milímetros, chalecos antibala y hasta un barbijo con el escudo de la Policía Bonaerense, los hombres que antenoche se tirotearon con agentes de la fuerza serían responsables de varios asaltos que se adjudicaron en los últimos meses a una banda de “polichorros”. Refuerza esa sospecha el auto en el que se movilizaban, un Renault Kwid blanco al que distintos testigos ubican en las escenas de distintos hechos, según se supo de fuentes del caso.

Como anticipó este diario en su edición de ayer, tras el tiroteo dos de los acusados fueron detenidos con heridas en las piernas, uno por impactos de bala y el otro porque cayó de un paredón tratando de escapar por el arroyo El Gato. Dos más, en tanto, lograron irse y son intesamente buscados.

El operativo, digno de una película, arrancó antenoche en 31 y 520 de este medio, donde en un patrullaje de rutina policías vieron el Kwid blanco “similar a uno utilizado días atrás en distintos hechos de modalidad entradera”.

Explicaron las fuentes que le dieron “la voz de alto para identificar a los ocupantes”, pero como en lugar de tocar el freno pisaron el acelerador, comenzó una persecución que tuvo un primer encontronazo en 524 entre 131 y 132.

Ahí, personal del Gabinete Táctico Operativo de la comisaría Undécima mantuvo un enfrentamiento armado con los ocupantes del vehículo, quienes siguieron fugando hasta 24 y 528, esquina en la que una patrulla de la comisaría Cuarta salió al cruce del coche de la banda y se desató un nuevo tiroteo.

Pese a todo los delincuentes lograron continuar el escape unas cuadras más, hasta que en 29 y 525 el arroyo frustró sus planes de avanzar un poco más. En un nuevo cruce de disparos, un joven de 26 años recibió impactos en ambas piernas que lo inmovilizaron. Cerca suyo secuestraron una pistola calibre 9 milímetros y un chaleco antibalas con la inscripción “Policía”, mientras que los otros tres ocupantes del auto saltaron un paredón para correr en dirección al curso de agua.

Uno de ellos se lesionó en el intento y fue capturado por agentes de la Local, mientras que los dos restantes se alejaron de la escena.

En un rastrillaje que se hizo en el arroyo secuestraron otras dos pistolas calibre 9 milímetros de las marcas Pietro Beretta y Bersa Thunder con las numeraciones borradas, además de dos chalecos antibalas de la fuerza y un barbijo con el escudito.

Los aprehendidos fueron trasladados al hospital de Gonnet, donde quedaron interados bajo custodia para ser indagados en las próximas horas. Los policias resultaron ilesos. Y ahora se investiga la participación de los sospechosos en asaltos protagonizados por polichorros.