Los duelos

Edición Impresa

Para Jorge Cattelli, psicoanalista especialista en psicología educacional, el paso de la secundaria a la universidad es un “acto concreto que tiene que ver con el inicio de la construcción de un proyecto de vida que implica un mayor protagonismo subjetivo, más allá de la figura de los padres”.

Según este experto, la elección de la carrera supera el deseo de los adultos, en el mejor de los casos, y si bien es una proyección personal, tiene la contrapartida de que está atravesada por tres duelos.

El primero “es por lo que no va a ser. Es decir, que la elección de una profesión lleva a dejar de lado otras que pueden interesar o atraer. El segundo duelo se corresponde a dejar el nido escolar que se tenía en la adolescencia con horarios, amigos, adultos y hasta experiencias de las cuales hay que despedirse”, explica Cattelli y agrega que acá también se puede dejar el nido parental, cuando se produce la migración geográfica de quienes se van de su ciudad para estudiar en otras.

El tercer duelo, según el especialista es “abandonar el rol de adolescente medio y de estudiante secundario para asumir el de universitario, que está asociado a ir en la búsqueda de algo que ya no es una obligación, sino que implica una posición activa para ponerse a estudiar”.

Pero además, el psicoanalista destaca que hay otras cuestiones cruciales en esta etapa de la vida de los jóvenes: “hay una toma de decisiones en un terreno de conflicto: siempre de debate con los ideales que se tenían y la realidad que finalmente se plantea. Y además, también están en juego los ideales y expectativas que los padres tienen sobre los hijos”.

En este sentido, Cattelli cree que el rol de los adultos, tanto padres como quienes están cerca de los ingresantes en este momento, tiene que ser de un acompañamiento no intrusivo. “Hay que dejarlos que se conozcan a sí mismos para que visualicen sus aptitudes, deseos y falencias. Es fundamental que estén presentes en las frustraciones y los primeros traspiés, que los jóvenes tengan, para que no se sientan solos”.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE