Este Boca no perdona

En el marco de la primera fecha de la Copa de la Superliga, Boca le ganó a Godoy Cruz por 4 a 1 en un encuentro que se disputó en el estadio Malvinas Argentinas de la ciudad de Mendoza y que fue dirigido por el colegiado Darío Herrera.

Y de entrada nomás la presión del campeón argentino surtió efecto porque ni llegó a despabilarse el Tomba, que los dirigidos por Miguel Ángel Russo abrieron el marcador.

Es que después de una serie de ataques forzados por el lado izquierdo del ataque Xeneize, una pelota quedó boyando fuera del área chica y Julio Buffarini le rompió el arco a Rodrigo Rey con un furibundo derechazo que dejó sin opción al golero local.

Es que encima, hasta ese momento, no había pasado mucho, porque lo único con aroma a gol, vino por el lado de Godoy Cruz y un centro que Andrada salió a interceptar, no agarró y casi se le cuela.

Pero bastó que Boca presionara para que pudiera desnivelar y a partir de allí empezara a ejercer supremacía en cada sector del campo de juego. Aunque claro, la apilada de Juan Brunetta pudo clavar la igualdad. Algo que llegó a los 28’ con un certero cabezazo de Tomás Badaloni que dejó sin chance alguna a Esteban Andrada.

Pero no le duró mucha la alegría al Tomba porque Boca volvió a presionar por la izquierda y después de un centro atrás el Toto Salvio con otro derechazo inatajable, puso al Xeneize arriba en el marcador, sólo dos minutos después de la anotación local. Lo de Eduardo Salvio es para remarcar porque en solo 26 encuentros con la azul y oro, el ex Lanús y Atlético Madrid, marcó su 10º tanto.

Y así nomás se fue el primer tiempo donde Boca se fue a los vestuarios como un justo ganador, porque solamente cuando aflojó un poquito, Godoy Cruz, se lo emparejó; porque los de la Ribera contaron ni más ni menos que con el 69 % de la posesión de la pelota y con ella, hicieron un buen juego.

En el periplo final el Tomba salió con otra actitud y en dos oportunidades estuvo a tiro de igualar el encuentro: primero con otro cabezazo de Badaloni y después con un tiro de Brunetta que reventó el ángulo izquierdo del arco defendido por Andrada. Pero los goles que no se hacen un arco....te los terminan de convertir en el propio.

Y eso es nomás lo que pasó en la primera aproximación seria de Boca en la etapa final cuando un derechazo fortísimo del “Cali” Izquierdoz, venció nuevamente a Rodrigo Rey y marcó el tercer gol bostero.

Y ahí nomás cuando aún faltaban más de 25 minutos para que Darío Herrera le bajara la persiana al encuentro, hubo olor a asunto sellado. Porque Boca, envalentonado, siguió yendo al frente y de casualidad Pol Fernández no consiguió el cuarto tanto. Que llegó nomás con el gol del recién ingresado Jorman Campuzano que marcó su primer gol con la auriazul y selló el 4-1 final.

Boca no perdonó al Tomba en el patio de su casa y le hizo morder el polvo en su presentación en esta Copa de la Superliga.