Las visitas a pacientes internados están muy restringidas en los centros de salud

Se aplica un protocolo para limitar la circulación de gente, aunque cada centro sanitario tiene potestad para definir el mecanismo

Edición Impresa

Aunque por estos días el Covid 19 acapara la atención sanitaria, no dejan de registrarse otras enfermedades que llevan a la internación de pacientes que, en muchos casos, requieren que un familiar los cuide o visite. Esa situación lleva a muchos a preguntarse cómo deben ser asistidos los internados o si es conveniente que queden completamente aislados. Ante esos interrogantes, desde la cartera sanitaria de la Provincia se comunicó que cada institución evalúa qué es lo mejor para la recuperación de cada enfermo, pero en un marco de mayores restricciones en las visitas.

Como ya se informó el mes pasado, desde que irrumpió la pandemia, los establecimientos dependientes del ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires comenzaron a funcionar con otra dinámica. En ese contexto, se refuncionalizaron los centros de salud y uno de los cambios que se produjo fue en la circulación y se establecieron accesos exclusivos para sospechosos de Covid 19.

“En los hospitales hay una doble circulación, por un lado se mueven los pacientes comunes y por otro, los que se sospecha pueden estar afectados por Coronavirus”, apuntó un vocero de la dirección provincial de Hospitales.

Para minimizar los riesgos de contagio se redujo al mínimo la presencia de personas que no sean pacientes o profesionales de la salud; se permiten menos visitas y se suspendió la atención de pacientes que no presentan patologías de urgencia.

“Cada hospital tiene la potestad de regular el régimen de cuidados de los pacientes internados para que no se resienta su recuperación”, comunicó el vocero de la cartera sanitaria.

Se insistió que la concurrencia a los hospitales está bastante restringida y que se busca que haya la menor cantidad de gente posible en esos lugares. Por eso se destacó que cuando los pacientes pueden continuar su tratamiento de forma ambulatoria, lo hacen de esa manera, con el seguimiento de profesionales que, por otros canales, establecen un contacto estrecho y toman decisiones a partir del conocimiento de distintas señales de alarmas.

“El tránsito de la gente por los hospitales es casi nulo, solo tienen que ir cuando la situación realmente lo amerita y como última instancia”, se informó.

Hace dos semanas la cartera sanitaria había informado que “se solicita la restricción del ingreso de visitas a internados y que en su lugar se quede solo una persona por paciente que cumpla la función de cuidador”.

Advertencia de cardiólogos

En tanto que la Sociedad Argentina de Cardiología señaló que la crisis sanitaria ocasionada por la pandemia obligó a los sistemas de salud a reorganizarse, y en muchos casos a posponer o suspender consultas presenciales o estudios diagnósticos no urgentes. “Esto conlleva a que los pacientes crónicos sean los más afectados, no se puede dejar de lado algunos problemas de salud a los que se les está prestando menor atención”, se indicó. Al mismo tiempo se instó a los especialistas a organizarse para continuar con los controles de los pacientes más susceptibles a la descompensación.

Además se comunicó que en pacientes con insuficiencia cardiaca crónica estable, sin síntomas de COVID 19, se recomienda: que la adherencia a los tratamientos indicados por sus cardiólogos tiene que ser extrema; aislamiento social, vacunación antineumococcica y antigripal; extremar las medidas higiénicas; evitar sobrehidratación.

También se recomendó la consulta virtual o telefónica con el fin de subsanar dudas, y evitar la concurrencia a centros de salud, así como el asesoramiento ante aparición de síntomas de descompensación para evitar internaciones que no sean necesarias.

Faltante de termómetros

La fiebre es uno de los principales síntomas del coronavirus y por esa razón en muchos hogares surgió la necesidad de comprar un aparato que, ante la menor duda, permita monitorear la temperatura corporal.

El aumento de la demanda agotó el stock de muchas farmacias que a la lista de faltantes entre los que están el alcohol, le agregó los termómetros. Por eso no fue extraño toparse con el cartel “no hay alcohol en gel, ni termómetros”, tal como se anunció en la farmacia ubicada en 16 y 50.

Desde el Colegio de Farmacéuticos de La Plata, su titular Alejandra Gómez reconoció: “hubo faltante de termómetros digitales en las droguerías porque en muchos hogares y lugares de trabajo salieron a comprarlos para poder controlar rápidamente la fiebre”. No obstante se reconoció que el abastecimiento se está normalizando y que el valor de los aparatos arranca en los $500.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE