Crece la inquietud de los padres del Albert Thomas por la crisis edilicia

Padres de alumnos de la Escuela Técnica 6 (Albert Thomas), se reunieron ayer con autoridades del colegio de 1 entre 57 y 58 y quedaron a la espera de respuestas para lograr un regreso seguro a clases. Aulas que las denominan “Siberia” porque no tienen vidrios, ni puertas; techos que crujen; paredes destruidas; y un rosario interminable de falencias edilicias marcan la gravedad del panorama que atraviesa ese establecimiento educativo que tiene cerca de 1.800 alumnos.

Ayer, algunos alumnos fueron a recuperar contenidos, en lo que fue el retorno de la presencialidad en la nueva normalidad. Y en la media mañana, un grupo de padres y madres se acercó a la sede escolar para encontrar respuestas.

Sandra, madre de un alumno que en este 2021 tiene que cursar séptimo año, dijo que “fueron muy pocas las precisiones que nos dieron. Cambio de autoridades, anuncios de obra en la planta baja, recuperar algún salón para cursar, y ver cómo se hará para retorno seguro a las aulas. ¿Por qué no se hizo nada en este tiempo que tuvieron?, se preguntó la mujer que dialogó ayer con este diario. Su indignación crece con el correr de los días. “Ver cómo está el colegio, en el estado en el que se encuentra me da bronca y tristeza. Soy egresada del industrial, donde tuvimos la suerte de tener otra realidad, mucho mejor de la que tienen los chicos en la actualidad. Nadie piensa que en estas pésimas condiciones se está forjando un futuro preocupante”, agregó.

Alertados por esta situación, decenas de padres se convocaron en la puerta del tradicional establecimiento para pedir que se lleve adelante un plan de obras que permita mejorar las graves falencias edilicias que harían peligrar el dictado de clases en situación normal y aún más en el marco de una pandemia, cuando la higiene cobra un papel más relevante del habitual.

Según contaron, no es la primera vez que le hacen un planteo a las autoridades, pero siempre topan con el mismo escenario: la falta de respuesta a los requerimientos.

Es por eso que decidieron movilizarse nuevamente y no descartaron hacerlo las veces que sea necesario hasta que sus reclamos sean oídos y vean la puesta en marcha de los arreglos que tanto necesita el edificio.

La indignación de los padres crece con el correr de las horas. Un padre que habló con este diario dijo que “en los cuatro años del gobierno anterior no se hizo nada en el colegio en materia de obras, y en este tiempo que corrió del actual gobierno tampoco. En conclusión, tenemos una escuela en estado calamitoso, imposible de asegurar condiciones para clases presenciales”.

Y otra madre agregó que “estamos escuchando que hubo obras en distintas escuelas de la Provincia. Por qué no le tocó a esta escuela emblemática, histórica, que tiene una matrícula enorme. Es una pena que nuestros hijos tengan que estudiar en estas condiciones”.

Además de las obras pendientes, que tienen carácter de urgente, en la reunión de ayer también trascendió que “se necesita el nombramiento de más auxiliares, porque durante la pandemia hubo despidos y los que están actualmente no alcanzan para cubrir las necesidades que requiere el edificio”.