Un gremio supeditó el regreso al aula a la circulación del virus

Edición Impresa

El secretario adjunto de la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera), Roberto Baradel, afirmó ayer que el 1 de marzo “está garantizado” el inicio de clases en la provincia de Buenos Aires “en la medida en que se cumplan los protocolos adecuados y no haya alta circulación del coronavirus, para no exponer ni a los chicos ni a los docentes”.

“Queremos que la vuelta a la presencialidad en el marco de una pandemia no implique que se propague el virus. Planteamos que se cumplan los protocolos para proteger a los chicos y a los docentes, algo absolutamente justo y razonable”, expresó el dirigente gremial en declaraciones formuladas en la radio.

Baradel rechazó que los sindicatos docentes hayan impedido la vuelta a las aulas y analizó que “esa fue una campaña de una parte de la oposición y de los medios hegemónicos para querer enfrentarnos a la sociedad”.

Sostuvo que en 2020 “se dijeron muchas mentiras” y señaló que “aunque fue un año atípico y anormal, hubo clases y se dieron respuestas en el marco de la pandemia”.

Así, recordó que en territorio bonaerense el año pasado unos 40 municipios en los que había baja circulación del virus “pudieron regresar a una presencialidad cuidada” y apuntó que, en el caso en que las condiciones para regresar a las aulas “no estén dadas” en algún distrito o que “los estudiantes y docentes estén expuestos a situaciones de contagio”, se continuará dictando clases de modo virtual.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE