Denuncian muerte violenta de un joven en un boliche, pero la autopsia no la avala

El informe forense descartó la existencia de golpes y heridas en el cuerpo de la víctima. Sí una lesión cardíaca preexistente

Edición Impresa

Un joven de 19 años murió ayer en Mar del Plata luego de ser hospitalizado tras ser echado de un boliche por personal de seguridad y, aunque sus allegados aseguraron que fue golpeado, la autopsia estableció que no habría lesiones, según informaron fuentes judiciales y policiales.

La víctima fue identificada como León Haziel Luna, y su fallecimiento se produjo a las 4.45, en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) de la localidad balnearia, media hora después de que fuera trasladado tras desvanecerse en la casa de su novia, Valentina Muliero (18).

De acuerdo a fuentes policiales, Luna había sido expulsado cerca de las 3 del boliche Mr. Jones, ubicado en la zona de Playa Grande, por un incidente dentro del local.

Según relató la novia del joven al fiscal Fernando Castro, titular de la Unidad Funcional de Instrucción 1 que interviene en la investigación del hecho, el personal de seguridad del local lo tomó del cuello para sacarlo del lugar.

De acuerdo al testimonio brindado por Muliero, la expulsión del joven se produjo luego de que él intentara pasar desde la burbuja en la que se encontraba con amigos a la que ocupaba ella.

La joven explicó que se colgó del brazo de uno de los custodios para evitar que lastimaran a Luna, y que al encontrarse con él fuera del boliche, le aseguró que había sido golpeado por el personal de seguridad.

Una vez fuera del local, los jóvenes llamaron a los padres de la novia para que los fueran a buscar, pero al llegar al domicilio Luna sufrió una descompensación y fue trasladado inconsciente al HIGA.

El informe preliminar de la autopsia ordenada por el fiscal estableció que la víctima no presentaba golpes ni lesiones y, en la operación, realizada por el Cuerpo Médico Forense policial, se halló en cambio un coágulo en el corazón, presuntamente provocado por alguna enfermedad preexistente.

“El chico no tiene marcas, no tiene rasguños, no tiene hematomas, ni ningún signo traumático que indique que haya recibido un golpe. Sí tiene una obstrucción cardíaca que es lo que le produjo la muerte, es decir que el fallecimiento no es producto de la intervención de un tercero”, dijo el fiscal. Señaló además que dispuso la identificación de todos los custodios del boliche.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE