El ladrón baleado por los custodios de Bonafini tenía orden de detención

Lo buscaban por el asalto con una picana ocurrido en febrero en un autoservicio de 22 y 69. Recibió tres tiros en el abdomen, lo operaron y está estable. A él y a su cómplice, también preso, los vinculan con varios hechos

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“Si se recupera, tendrá que afrontar varios procesos, porque ya tenía pedido de detención en una causa y aparece mencionado en varias más”, comentó un jefe policial aludiendo al sujeto que anoche permanecía internado con los tres disparos que 24 horas antes recibió en el abdomen, al intentar asaltar a dos hombres que estaban frente a un domicilio de 45 entre 20 y 21.

Es que la casa frente a la que se desarrolló la escena es la de Hebe de Bonafini y quienes eligieron como víctimas eran dos custodios de la Policía Federal vestidos de civil, confirmaron distintas fuentes.

Uno de los asaltantes, como ya se dijo, recibió tres de los cuatro tiros que siguieron al intento de robo y fue derivado al Policlínico San Martín, donde lo operaron y quedó internado en estado reservado, aunque con buena evolución. El presunto compinche, detenido cuando llevó a su amigo malherido a la guardia, resultó ileso y quedó preso. El fiscal Juan Menucci se disponía a indagarlo.

Todo pasó minutos después de las 23 del lunes frente a la casa de la dirigente de Madres de Plaza de Mayo, aunque nadie cree que el objetivo fuera ella. “Son ladrones comunes, salen a la caza. Vieron a estos dos hombres” en un Fiat Mobi “y fueron a asaltarlos”, especuló un pesquisa.

Los sujetos se movilizaban en un Peugeot 307 de color negro, del que bajó uno de los dos para encarar a un suboficial y a un sargento de la División Unidad Operativa Federal La Plata. Fuentes con acceso a la investigación revelaron que el ladrón forcejeó con el sargento “y abrió fuego”, lo que derivó en que éste “repeliera la agresión”. Herido, el asaltante corrió hacia el auto para huir a toda velocidad con quien estaba al volante, sin concretar el robo. Los policías y Bonafini (bajo custodia dispuesta por el juez federal Ernesto Kreplak), resultaron ilesos.

Mientras se desplegaba por el casco urbano y los accesos un impresionante operativo cerrojo para localizar al Peugeot y sus ocupantes, desde el hospital San Martín alertaron al 911 que acababa de ingresar a la guardia un paciente con tres disparos en el abdomen.

Fue identificado como Jonathan Ezequiel Artaza Zavalla, de 33 años. Su acompañante, Gerardo Luis Nieto (33), se quedó en el hospital y ambos fueron detenidos.

El automóvil también fue secuestrado en el lugar, pero no se encontró ningún arma. Sí secuestraron cuatro tablets; un celular; una cadena de oro; una picana y un gas pimienta. Contra todos los pronósticos, el coche no es robado ni tiene pedido de secuestro, sino que “el titular es Nieto”, acotó la misma fuente, sin pasar por alto que “los dos aparecen mencionados en varias causas”, aunque solamente Artaza tiene orden de detención.

Es por un asalto que tuvo mucha repercusión por el tipo de arma implicada. Fue el 4 de febrero en un autoservicio en 22 y 69, donde un delincuente sacó de entre sus ropas una picana eléctrica que prometió usar si no le daban el dinero de la caja registradora. Se llevó también dos celulares y algunos golpes que le dio un cliente que forcejeó con él para evitar el robo. No obstante logró escapar y huir en una moto conducida por un compinche. En marzo, la DDI hizo tres allanamientos en Berisso, en uno de los cuales secuestró la picana y detuvo a dos sospechosos. Sin embargo, el principal acusado no fue encontrado.

“Se trata de Artaza Zavalla”, confirmó un pesquisa, y aclaró que “al menos en esa causa Nieto no aparece mencionado”. Ambos son de la zona de El Palihue y “tienen antecedentes penales”. Ayer allanaron el domicilio de Nieto, en 121 bis entre 613 y 615, secuestrando allí una remera con manchas de sangre, una gabardina con el escudo de la Policía bonaerense y su DNI, informaron los voceros del caso.

En las últimas horas se presentaron en la DDI denunciantes de otros hechos que “reconocieron el auto” implicado en el incidente frente a la casa de Bonafini.

Uno de ellos es un jubilado que el 20 de febrero fue atacado a golpes por delincuentes que lo sorprendieron en su casa de 1 entre 99 y 600, detallaron los voceros. Por el hecho del lunes el fiscal Menucci pidió secuestrar las armas de los policías y ordenó peritajes balísticos en la escena, donde se encontraron cuatro casquillos y una cabeza de proyectil.

 

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