Central fue el “invitado de piedra” en la despedida de Gallardo del Monumental

Con goles de Alejo Véliz, Rosario Central, bajo la conducción de Carlos Tevez, dio el golpe con un triunfo por 2-1 como visitante de River, que descontó vía Matías Suárez, en lo que fue la despedida del estadio Monumental de Marcelo Gallardo, el técnico que anunció su alejamiento de la institución de Nuñez tras ocho años y medio.

El partido correspondió a la fecha 26 del torneo y ganó en intensidad en el tramo final, luego del descuento, porque el juego se abrió de par en par, con jugadas de ida y vuelta, algunas plagadas de polémica y la expulsión del “JuanFer” Quintero por empujar al árbitro. Se jugaron 19 minutos de descuento.

Ni bien Gallardo anunció el final del ciclo, su figura se convirtió en eje central, y la fiesta de despedida, que no estaba en los planes de nadie avanzó con entradas que se agotaron en cuestión de horas para ocupar cada espacio de un estadio que volvió a lucir colmado con más de 72.000 personas.

Pasacalles, carteles, banderas y camisetas, todo sirvió para despedir al técnico más ganador de la historia del club de Nuñez, en cuya despedida se proyectó, en la pantalla gigante, un video con una recopilación de los mejores momentos, a partir de 2014, cuando se hizo cargo del equipo, hasta la fecha.

El hombre de la noche, que ni bien pisó la cancha escuchó el repetido “Muñeeeco, Muñeeeco”, que bajó desde las tribunas con más fuerza que nunca, porque todos estaban de acuerdo con que se trataba de su última función, continuó saludando a quien se le cruzara por delante, incluso a Carlos Tevez, el DT del elenco rosarino, y emocionado se resguardó en el banco de los suplentes.

A esta altura, con el Monumental en modo fiesta, ya se había confirmado la formación para comenzar el juego contra Central, con cinco variantes con respecto al partido anterior, contra Platense: Adentro Leandro González Pirez, David Martínez, Elías Gómez, José Paradela y Lucas Beltrán, en lugar de Emanuel Mammana, Javier Pinola, Milton Casco, Nicolás De La Cruz y Miguel Borja.

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La derrota de Boca en su visita a Newell’s significaba alimentar la posibilidad de dar el golpe en el cierre de la Liga Profesional, aunque las emociones por el adiós a Gallardo estaban muy por arriba de cualquier otra cosa. El pasaje a la Copa Libertadores 2023, que River jugará con otro técnico, estaba asegurado desde la fecha anterior.

En este marco, a pesar de las intenciones, los Millonarios no pudieron hacerse cargo del juego, y menos desarrollar jugadas profundas en ataque, frente a un Central que achicó los espacios en terreno propio con el plan de salir rápido.

Lo hizo por primera vez a los 12 minutos, con un pelotazo de Véliz en el travesaño, y en el siguiente intento, a los 13, encontró el gol: pelotazo cruzado para Gino Infantino, quien sacó un pelotazo bajo que Franco Armani, en su cumpleaños número 36, no pudo resolver, otorgando un rebote que Véliz no dejó pasar: 1-0.

Golpeado, el equipo de Gallardo fue por el empate, y aunque dispuso de un par de situaciones, con un remate de Elías Gómez en un palo, no encontró los espacios.

Los ingresos de Nicolás De La Cruz y Matías Suárez fueron dispuestos con el propósito de refrescar el ataque, pero el 2-0 de Véliz en el primer ataque de Central representó un golpe del que River no consiguió reponerse. El descuento de Suárez calentó un final que incluyó un gol anulado a Central y la expulsión de “JuanFer”. La noche terminó con Gallardo hablándole a una multitud que lo ovacionó.