Chau a la media res: patearían la medida hasta enero

El Gobierno iba a aplicar desde mañana la comercialización de carne vacuna en trozos. Pero la negativa de un sector de los frigoríficos habría obligado a una nueva prórroga

Edición Impresa

Pocas horas después de que el Gobierno ratificara que a partir de mañana entraría en vigencia el nuevo sistema de comercialización minorista de carne vacuna por trozos (en lugar del actual, por media res), trascendió anoche que la medida se “patearía” hasta enero. ¿El motivo? La oposición del sector de los matarifes y frigoríficos que abastecen al mercado interno.

Lo que en la Casa Rosada buscaban a partir de mañana era avanzar con un esquema anunciado en abril del año pasado a través de una resolución conjunta de los entonces Ministerios de Agricultura, Ganadería y Pesca; Trabajo, Empleo y Seguridad Social, y Desarrollo Productivo. La idea era que en lugar de “hombrear” la media res de 120 kilos que llega a las carnicerías, los trabajadores cargaran con cuartos troceados de no más de 32 kilos. El sistema ya se aplica en Brasil, Uruguay y Paraguay. Aquí iba a regir desde el primer día de noviembre. Pero ahora, como se dijo, deberá esperar hasta el año próximo.

Entre los que defienden la medida están los frigoríficos exportadores y la rechazan los matarifes y frigoríficos que se dedican al mercado local. En el medio, los consumidores.

En medio de la polémica y antes de que se conociera la nueva prórroga, el director nacional de Inocuidad y Calidad Agroalimentaria del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), Alejandro Fernández había advertido que no había “vuelta atrás” y que “este es un tema que no es que viene de hace dos años, sino que se discute hace 20 o más. El ruido hoy surge por la intervención de las organizaciones del Estado”.

Apoyos y rechazos

La medida que impulsa y ratifica el Gobierno es apoyada por el sector exportador, mientras que las cámaras empresarias más ligadas al abastecimiento del mercado interno la rechazan por considerarla “inviable” en la actualidad. Pues se quejan de los costos que requiere la adaptación de las plantas, los tiempos para realizarlas y la supuesta falta de financiamiento para llevar a cabo las obras. Por esto, proponen la utilización de medios mecánicos para bajar las medias reses de los camiones y evitar así el “hombreo” de los trabajadores para su descarga.

Lo cierto es que, de aplicarse en tiempo y forma, la iniciativa resultará en un antes y un después para la industria y el comercio de la carne vacuna, que no solo afectará a las plantas faenadoras, sino que también impactará en las carnicerías, que pasarán a trabajar con trozos más pequeños que la media res (el animal cortado al medio, sin la cabeza ni las víscera y que pesa entre 90 y 120 kilos). Al mismo tiempo, significará una mejora en las condiciones laborales.

En plena controversia, el director del Senasa confió en que, si bien al principio estas medidas pueden generar “rechazo y ruido, finalmente la cadena se va a adaptar. Esperamos que en pocos meses esté la situación definitivamente acomodada y el año que viene podamos ver un nuevo sistema de comercialización de carne”.

Según detalló el funcionario, uno de los objetivos de la medida es evitar que los trabajadores continúen descargando a las carnicerías la media res al hombro, teniendo en cuenta que cada una puede llegar pesar 120 kilos.

En este tipo de transporte también “hay impactos en la higiene y calidad del producto, porque la forma de trasladarlos o entregarlo de esta manera hace que la medida res se caiga o se arrastre y se ponga en contacto con elementos que contaminen el producto”, advirtió Fernández.

Además, está el punto de precios, ya que desde el Gobierno esperan que “haya una distribución más eficiente en la cadena comercial respecto a los destinos de los distintos trozos que contienen cortes diferenciados, lo que va a permitir llevarlos hacia aquellos sitios donde serán consumidos”.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE