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El exceso puede generar varias problemáticas, tanto sociales como físicas. Recomendaciones para realizar una rutina sana y de forma duradera
En una era marcada por la tecnología, especialistas dedicados a la seguridad en línea y bienestar digital han desarrollado un nuevo término referido a su uso dentro del núcleo familiar, con respecto al contenido e interacciones que realizan sus integrantes habitualmente. Se trata de la Dieta Digital Familiar (DDF), que enfatiza en la necesidad de encontrar un equilibrio en lo que se consume, con el fin de conseguir un bienestar personal pleno y en convivencia con los demás. Es decir, permitir conseguir ese balance para lograr objetivos individuales de la vida y también brindar apoyo en los de los demás.
El escenario ideal para el uso tecnológico sería realizarlo dentro de la familia y también fuera de su entorno; pero es una situación bastante compleja debido a que la necesidad de estar conectados constantemente (para no quedar afuera del contacto con el mundo), genera que los individuos se distraigan y no se den cuenta de lo que sucede a su alrededor. La era digital ha abarcado todos los campos sociales y culturales, como el colegio, el trabajo, espacios de ocio y de entretenimiento, entre otros, provocando una simple ventaja: la comodidad de poder comunicarse, desde el living de una casa.
La desventajas que genera ese sentimiento de confort es alejarse del contacto directo con otras personas o de las actividades presenciales, por lo que se debe evitar para no generar un conflicto y encontrar el punto exacto para mantener la vida virtual y la real, en conjunto. Para esto, especialistas recomiendan que es de suma importancia que además de encontrar el equilibrio individual, el mismo se trabaje a nivel familiar. Es clave el papel de los padres, ya que los adultos tienen las cosas más claras y a su vez, mayores capacidades de control y autocontrol, con el fin de guiar y educar a los más chicos en el día a día. Ante esto, es importante marcar pautas claras, donde hayan horarios y distintas rutinas para un uso saludable y adecuado de la tecnología, tratándolo de adaptarlo a la rutina como algo normal.
También es importante evitar el “alejamiento” de los seres queridos, ya que si bien la era de la tecnología se lleva a cabo de manera individual, muchas veces puede suceder que algún integrante se centre dentro del mundo virtual e ignore lo que lo rodea, generando desatenciones hacia los otros miembros pese a compartir el mismo escenario.
Para evitar que la interacción con internet, por ejemplo, provoque el aislamiento, es fundamental que las familias utilicen las herramientas digitales para hacer actividades en conjunto: desde ver jugar juegos, películas u otros eventos, con el objetivo de mejorar y reforzar los vínculos. Existen muchos casos donde las personas deciden alejarse completamente de lo digital y lo eliminan de sus vidas durante un tiempo, pero eso no termina siendo una buena solución. Incluso, cuando vuelven a meterse en el campo digital, nuevamente aparece la hiperconectividad y el excesivo uso de pantallas. Ante este panorama, los especialistas afirman que la DDF debe realizarse en un determinado proceso, de manera paulatina, pero no a largo plazo. Lo ideal es controlar las horas de uso frente a los aparatos y también las horas donde se están alejados de ellos, para conseguir una rutina saludable e ideal que perdure a lo largo del tiempo.
Es necesario también, que el entretenimiento sea compartido con actividades al aire libre, con el fin de mantener una salud física adecuada y evitar diferentes problemas posturales, de vista, físicos; y también otros psicológicos y sociales, como la dependencia, la ansiedad, trastornos del sueño, el aislamiento y hasta la adicción. Lo destacado para un individuo es que lo digital no controle su tiempo, sino que él controle a lo digital, encontrando momentos de desconexión. En muchos niños y jóvenes, es común que las consolas o los distintos videojuegos, provoquen problemas en su socialización , ya que su interacción con amigos es de manera virtual; y también otras problemáticas en sus cuerpos, como el sedentarismo.
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También en jóvenes y adultos, se ha vuelto un problema el excesivo uso de los celulares en todos los ámbitos de la vida, como en reuniones laborales, recreativas y familiares; o inclusive, mientras manejan, provocando en algunas ocasiones accidentes de tránsito.
Es clave guiar a los chicos sobre la utilización del celular
1 - Generar un equilibrio entre las horas de conexión frente a las pantallas y las horas que se disfrutan fuera de ellas, con el fin de lograr una rutina saludable que perdure con el tiempo.
2 - Conseguir momentos donde no se use la tecnología y que las actividades tanto recreativas como profesionales, sean al aire libre.
3 - Establecer horarios de uso y respetarlos en el día a día, para obtener el control del consumo tecnológico
4 -En lo familiar, que los padres puedan predicar con el ejemplo a sus hijos, ya que los mismos transitarán su camino en base a su referencia.
5 - Lograr una comunicación fluida con los hijos sobre sus usos con las herramientas digitales. Es importante hablar de manera abierta, cercana y sin obviar u ocultar temas que puedan ser incómodos. Es clave darle naturalidad a la conversación y exponer todos los riesgos y ventajas de una situación, puede ayudarnos a que todo funcione de manera fluida y con mayor confianza y respeto por ambas partes.
6 - Realizar actividades con la tecnología de manera grupal, como ver alguna película, jugar un juego o ver algún evento televisivo.
7 - Es importante que los padres les pauten el tiempo de actividad tecnológica, con el fin de que tengan contacto con la realidad y no se desvíen de sus actividades sociales y educativas.
8 - Restringir el uso de pantallas antes de acostarse, al menos una hora antes de irse a la cama, lo que ayudará a mejorar la conciliación y calidad del sueño, tanto de adultos como de menores.
9 - En el caso de nenes muy chicos, es importante que los padres los acompañen durante sus conexiones con la virtualidad, para tener un control de los contenidos que consumen.
10 - Otorgar las herramientas tecnológicas a los más chicos de manera paulatina, con el fin de resguardar su salud mental y física.
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