La verdad, no terminé de entender lo que hizo Van Gaal

Por JULIÁN CAMINO (*)

Las emociones fuertes aparecieron en los últimos diez minutos, cuando empató Holanda. Hasta ese momento jugaron un partido mediocre, con un rival muy estructurado, que no pasaba de tocar la pelota y de marcar en la mitad de la cancha sin arriesgar nada. Con el riesgos que una actitud permite suponer porque a veces, cuando se arriesga algo más, por ahí de contra te sorprenden.

Por eso, los dos equipos se estudiaron mucho y ninguno de los dos quiso hacer ese trabajo de ir a atacar. Capaz que Argentina buscó un poquito más, pero no demasiado... Y bueno, como siempre, apareció el genio, inventando una jugada que sirvió el 1 a 0.

Contra un rival tan estructurado como el que enfrentó Argentina, se hace complicado jugar

En lo personal, mi crítica está dirigida al técnico de Holanda, porque en el segundo tiempo hizo unos cambios bárbaros, con los cuales pudo meter en un arco a Argentina y empatarle 2 a 2. Pero va a suplementario y los manda a todos atrás de nuevo. No, le erró mal.

Si le empataste 2 a 2, lo ves a Argentina que está mal, que lo está superando, seguí igual, a ver qué pasa. Si lo tenía controlado al partido. Le erró el técnico, mal. La verdad muy tibio. Lo mandó de nuevo para atrás y Argentina lo pudo haber ganado en el suplementario, porque lo atacó y atacó, tuvo una de Lautaro que sacaron con el pecho, otro tiro en el palo, otra jugada que en la que entraron en el área y tiraron un centro atrás que casi entra. En ese momento fue mucho mejor Argentina.

Para mi, si se analizan los distintos momentos del partido, le erró muy mal el técnico de Holanda, muy mal. Van Gaal está catalogado como uno de los mejores técnicos de Europa, pero esta vez le erró. Lo tenés muerto al rival y ¿te vas a tirar atrás?

En lo que tiene que ver con las actuaciones en el equipo argentino, me gustó Otamendi, bien parado atrás, sacando mucho de arriba contra rivales altos y fuertes; De Paul, a quien no se porque Scaloni lo habrá sacado, porque agarraba la pelota y pasaba al frente; y la genialidad de Messi... Después Acuña, por izquierda, pasando mucho al ataque, igual que Molina por la otra punta.

Cuando el técnico lo sacó a De Paul, la Selección ganaba tranquila, y puso a Paredes, se frenó un poquito el equipo. Pero son cosas que pasan.

Lo que está claro, con este partido, y también con otros, es que en un campeonato Mundial tenés que tener un poquito de suerte. Con el grupo al que entra el seleccionado y cómo se va eliminando el resto. Es así, y Argentina puede llegar a la final sin enfrentar a una potencia. Entendiéndose por esto Alemania, España, Francia e Inglaterra, por ejemplo.

(*) Ex ayudante Selección