Un cuento chino en La Plata: a un mes de la fuga del líder de la mafia

Ke Deqiang, presunto capo de la organización delictiva, tiene pedido de captura internacional tras fugarse de la comisaría 1ª la madrugada del 19 de mayo. Cómo actúan estas bandas criminales y a quiénes responden

Edición Impresa

La “Tríada”, como suele llamarse a la mafia china, logró demostrar su poder en La Plata. Como por arte de magia, hizo desaparecer a un ciudadano chino que lideraba una banda criminal, peligrosa y organizada. Esta historia de capos y mafiosos mantiene en vilo a la ciudad y a la propia comunidad del sudeste asiático.

Justamente hoy se cumple un mes de la fuga más insólita de la que se tiene memoria. Estamos hablando de Ke Deqiang, dueño de un supermercado emplazado en el barrio de La Loma, apuntado como uno de los líderes de la organización delictiva. Empero, entre gallos y medianoche, el “Houdini” oriental logró evadir los controles policiales y se escapó a pie, como pancho por su casa, atravesando dos puertas atrancadas con sólidos candados.

Muy poco se sabe hasta el momento del presunto jefe de la famosa “mafia china” que operaba en nuestra ciudad extorsionando sin piedad a empleados y dueños de supermercados, sus propios compatriotas. A Ke Deqiang lo busca la Policía Internacional, y se manejan varias hipótesis en cuanto a su fuga y dónde podría estar escondido.

Tras el aparatoso allanamiento que montó la Policía, operativo que contó con drones, decena de efectivos, y una puesta en escena casi de película de Hollywood, sólo dos minutos le bastaron a Ke Deqiang para fugarse de la dependencia policial de 53 entre 9 y 10, de donde huyó extrañamente sin realizar boquetes y forzar las rejas o las cerraduras de su celda.

Por este hecho, investigan si los efectivos que estaban de turno esa noche colaboraron con su escape. En tanto, quedaron imputados siete de ellos, aunque en los pasillos de la comisaría reina el silencio, y cada vez se hace más difícil encontrar al “Houdini” oriental.

UN CUENTO CHINO

Esta historia comenzó hace dos años, exactamente el 10 de agosto del 2020, en un comercio llamado “Emanuel”, situado en 122 entre 69 y 70, en el límite de la capital bonaerense y la vecina ciudad de Berisso.

El virus mortal del Covid-19 recién empezaba a circular en nuestro país y las medidas de restricción por parte del Estado estaban latentes.

Esa fría y desolada tarde de invierno fue el escenario propicio para que varios encapuchados a punta de pistolas, armas blancas y palos, ingresaran al comercio de origen chino a provocar desmanes.

Los criminales comenzaron a golpear a los empleados, a los propietarios del local y dañaron todo lo que vieron a su paso.

En el expediente que se inició por este hecho se detalló que actuaron “siete o más personas, todas presuntamente de nacionalidad china, portando munidos palos, objetos punzo cortantes y armas de fuego de empuñadura”.

Este violento ataque se dio en dos franjas horarias: la primera exactamente a las 17.19; y segunda, alrededor de las 19 horas, cuando la noche comenzaba adueñarse de la jornada.

“Los sindicados irrumpieron de manera violenta y ofuscada en el interior del local comercial tipo supermercado llamado ‘Emanuel’, con serio motivos criminales”, remarcaron los investigadores.

La banda delictiva no sólo generó pánico entre los presentes, sino que además fueron directamente a exigirle a sus propietarios una exuberante suma de dinero en dólares, logrando con posterioridad generar varios daños materiales del comercio e impidiendo el libre ejercicio de la actividad.

Incluso, uno de los trabajadores del supermercado quedó gravemente lesionado. Los fuertes golpes propinados con un palo, le causaron una fractura en una de sus piernas.

Los atacantes habían llegado a bordo de dos autos de alta gama, según pudo reconstruir la fiscalía, y actuaron en cuestión de minutos. Ya tenían sus pasos planificados. Lo que no pensaron era que podían ser reconocidos.

Fue entonces que los titulares del supermercado “Emanuel” alertaron al 911 y varios móviles del Comando de Patrullas se dirigieron al lugar para entrevistarse con las víctimas.

El propio dueño del comercio apuntó directamente contra Ke Deqiang, alias Matías, a quien ya tenía visto por ser el vicepresidente de la Cámara de Comercio china en La Plata, Berisso y Ensenada, región que concentra alrededor de 300 supermercados de origen asiático.

“Comenzó, entre insultos, a decirme que para dejarme trabajar debería pagar 10.000 dólares. Me dijo también ‘ quiero la plata, o sino voy a matarte con una pistola”, declaró el damnificado.

La pesquisa avanzó con la identificación de los agresores por parte de la Dirección Enlace Interpol y eso derivó en el operativos que lograron dar con uno de los atacantes, el líder.

ALLANAMIENTO DE PELÍCULA

El 12 de marzo de este mismo año, un convoy cargado de decena de efectivos de la Dirección de Delitos Complejos, de Crimen Organizado, Grupo GAD, policía bonaerense y la DDI local, y la mar en coche, montaron un aparatoso operativo en búsqueda de los integrantes de la banda criminal que causaba temor en la Ciudad.

Fueron en total siete allanamientos los que se llevaron a cabo: cinco de ellos se realizaron en comercios, mientras que los restantes los hicieron en domicilios.

La disposición de la UFI N° 16, a cargo del fiscal Juan Cruz Condomí Alcorta y el Juzgado de Garantías N° 2 de La Plata, fue clara: ir a buscar a Ke Deqiang y sus cómplices.

El hombre de 44 años fue aprehendido en su propio supermercado ubicado en el barrio La Loma de la capital provincial, más precisamente en 25 entre 34 y 35.

Al momento de la aprehensión, Matías se encontraba con su pareja de hecho, ya que su esposa se encuentra en China, aún sin poder volver a causa del confinamiento.

Además del presunto capo de la mafia, fue detenido otro ciudadano de 39 años, en un allanamiento efectuado en la ruta 11 y 600, en el barrio El Carmen; junto a otro hombre de nacionalidad china de 43 años, a quien se llevaron aprehendido por el delito de portación ilegal de arma de guerra, quien cayó en el supermercado de 137 y 523. Estos últimos dos sujetos, posteriormente fueron excarcelados.

El líder de la banda se fugó de la comisaría / captura

PALO Y A LA BOLSA

De este insólito hecho se desprenden dos causas distintas. Por un lado, se encuentra la investigación llevada a cabo por el fiscal Juan Cruz Condomí Alcorta sobre la presunta organización delictiva que lideraba Ke Deqiang. Paralelamente, la fiscal Virginia Bravo (titular de la UFI Nº 7) trata de establecer los detalles de su fuga.

En la primera, a los investigadores todavía les toca establecer la identidad del resto de los implicados que actuaron en irrupción y extorsión en el supermercado Emanuel. El propietario del comercio que fue atacado a palazos por una patota, mencionó también otros dos nombres, quienes podrían ser los presuntos cómplices.

Por otro lado, fuentes judiciales calificadas informaron a EL DIA que existen otros sindicados como coautores en este hecho, que operan directamente desde China. Todos ellos están imputados por el delito de “extorsión agravada por el empleo de armas”, en concurso real, y a su vez “lesiones graves y portación ilegal de arma de fuego de uso civil”.

Vale remarcar que los otros dos ciudadanos chinos detenidos durante los allanamientos fueron excarcelados, tras una resolución del Juzgado de Garantías Nº 2, a cargo de Eduardo Pelossi, que denegó la prisión preventiva solicitada por el fiscal Juan Cruz Condomí Alcorta.

Hay siete policías imputados en la causa, acusados de colaborar con la fuga de Ke Deqiang

 

En ese marco, el abogado del imputado, Mauro García Strigl, había solicitado el cambio de calificación de uno de los implicados y pidió su excarcelación, la cual fue otorgada ya que se no encontraron pruebas suficientes para determinar que el acusado estaba involucrado en la banda que estaba siendo investigada.

Por su parte, otro de los acusados de integrar la banda de extorsionadores ya había sido liberado anteriormente. La decisión de la Sala 4 de la Cámara Penal platense del 1 de abril, hizo lugar al Hábeas corpus que presentó el abogado Damián Barbosa, por lo que se dispuso la “inmediata libertad”.

El único que había quedado tras las rejas por esta causa era Ke Deqiang, quien estaba alojado en la comisaría primera de La Plata, en una de las celdas individuales que se encuentran en esa dependencia policial.

COMO PANCHO POR SU CASA

El reloj marcaba las 1.30 de la madrugada del 19 de mayo, exactamente un mes atrás en el tiempo. Al hombre de 45 años le bastaron tan sólo dos minutos para fugarse. Con las manos en los bolsillos y a pasos tranquilos, el sujeto salió literalmente a pie de la comisaría, como pancho por su casa.

La sospecha de la fiscal Virginia Bravo es que el evadido contó con la ayuda de los policías que estaban en ese momento de turno. Fuentes del caso manifestaron a EL DIA que el lugar donde estaba alojado Ke Deqiang era de difícil acceso.

El hombre atravesó dos puertas con poderosos candados. Sin ayuda, ni la llave, el ciudadano chino no habría podido salir de allí.

El primer apuntado fue el comisario titular de la comisaría, Julio Del Dago. Si bien quedó apartado de su cargo por “responsabilidad objetiva”, no fue imputado ya que, en el momento de la fuga, no estaba en servicio.

Ke Deqiang prófugo

“Esa jornada me retire a las 19.30 y volví al día siguiente. Cuando llegué, me comunicaron que el detenido se había fugado”, relató en diálogo con este diario.

Los siguientes sindicados como colaboradores de la evasión fueron el jefe de turno, el oficial de servicio, el ayudante de guardia, dos efectivos que estaban en el móvil que habían bajado varias veces a la comisaría, y oficiales de la imaginaria. Todos ellos fueron desafectados de servicio.

En tanto, la fiscal pidió secuestrar los libros de guardia de los últimos días y lo mismo ocurrió con los celulares de los agentes que se encontraban en el lugar cuando todo sucedió.

¿DÓNDE ESTÁ KE DEQIANG?

El ciudadano chino, al que muchos conocen como Matías, está prófugo desde el 19 de mayo y es intensamente buscado por la Interpol.

Se sospecha que el sujeto no se esconde en nuestro país y que habría salido de Argentina en dirección a Uruguay. Desde la vecina ciudad de Ensenada, le demoraría apenas media hora “cruzar el charco”.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE