Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí
Alejandro Castañeda
Alejandro Castañeda
Para los infieles, la fiesta del mundial va a ser incompleta: aquellos que vayan a la Copa del Mundo en Qatar se encontrarán con una particular prohibición: no se permitirán las relaciones sexuales extramatrimoniales. Y quienes las tengan, podrán ser multados hasta con la cárcel. Quieren un torneo donde sólo jueguen los titulares y haya tarjeta roja para los suplentes. Nada de recurrir al banco a la hora del placer. Hay penas de hasta siete años para quienes son descubiertos beneficiándose una/o de la otra cuadra.
Sin duda, atrasa y castiga el puritanismo excesivo de esas religiones, pero bueno, mejor no desafiarlas, porque allá no hay fueros que protejan a la hora de las tropelías. Nada de besos en la calle. Para cualquier mimo fuera de escala, será exigida la libreta de casamiento.
Por supuesto, el sindicato de las prosti, que estaba con las valijas hechas para jugar clásicos en plena contienda, ha tenido que replantear sus localías. Ahora deberán camuflarse entre las hinchas o hacerse las amas de casa o disfrazarse de barras bravas si quieren brindar algunos servicios apurados a la salida de las tribunas.
Es un Mundial en el que no permitirán las relaciones sexuales extramatrimoniales
Hay hasta siete años de cárcel para los infieles
La exigente doctrina de allá busca cerrar todas las puertas y desalentar a los infieles. ¿Para comprar condones habrá que hacerse acompañar por la doña? Una cosa es garantizar el buen trato en los estadios y en las veredas, pero otra es prohibir el amor extraconyugal en esos días donde los goles invitan al festejo.
LE PUEDE INTERESAR
El programa +ATR sigue hasta el receso invernal
LE PUEDE INTERESAR
Hay preocupación por un pozo en Altos de San Lorenzo
Según publicó el medio británico “Daily Star”, los “apasionados que pretenden festejar con aventuras de una noche, podrán ser condenados hasta siete años de prisión. Ese medio detalló además que funcionarios de la FIFA incluso ya advirtieron que “no se harán excepciones” durante el torneo, lo que además despertó las alertas de los hinchas y autoridades de otros países”. Y una fuente policial les explicó que “el sexo está muy fuera del menú, a menos que vengas como marido y mujer. Definitivamente no habrá aventuras de una noche en este torneo y se prohíben las fiestas”. Y recordaron “que tanto el sexo fuera del matrimonio como la homosexualidad están declaradas como ilegales en Qatar, siendo ambos actos considerados delitos que conllevan penas de hasta siete años de prisión”.
Falta saber si las muñecas, los vibradores y toda la ferretería erótica también fueron prohibidas, porque en el fondo se trata de una infidelidad remota. La oferta de juguetes golosos muestra, científica y socialmente, los progresos libidinosos del sexo, que ya ha derrotado al viejo sentimentalismo y que ahora va directamente a reemplazar al copiloto en las mejores noches. Las nuevas tecnologías se rebelan así contra el catálogo estricto del porno tradicional y obligará a las religiones más rigurosas a sancionar el uso de cualquier aparato que pretenda reemplazar los polvos conyugales.
La tabla de multas no ayuda: a quienes se los sorprenda en el lecho, pero inactivos, se los encuadrará en modo intento. A los que vayan ingresando a un hotel, se los advertirá del riesgo de semejante atrevimiento. Pero, a los que pesquen in fraganti serán castigados duramente por andar goleando en su propio partido mientras afuera el mundial sucede.
Tampoco se ha legislado sobre la competencia de las masajistas curiosas, que empiezan acariciando los músculos más inocentes y de a poco le van encontrando mejores lugares a sus manos.
Mundial raro donde será conveniente, por las dudas, no andar deseando y limitar los festejos a lo estrictamente deportivo. No hay que sobrepasarse con la euforia. Los que se hacían ilusiones de poder acceder a un fixture extra con el resultado puesto, se quedarán con las ganas por culpa de esos inspectores que ignoran que un amor clandestino bien llevado alcanza la sensación de una plenitud de a dos que multiplica los pecados juiciosamente. Los cataríes no quieren prohibir el sexo. Porque a esta altura, todos los científicos lo ponen en el altar de lo exigible más que de lo recomendable, sin tener en cuenta si es con la oficial o con la amante. Ellos, por más puritanos que sean, no pueden desconocer que todo hincha necesita poder darle satisfacciones al cuerpo sin tanta vigilancia.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE
ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES
HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS
Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales
¿Ya tiene suscripción? Ingresar
Básico Promocional
$135/mes
*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $2590
Acceso ilimitado a www.eldia.com
Full Promocional
$190/mes
*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $3970
Acceso ilimitado a www.eldia.com
Acceso a la versión PDF
Beneficios Club El Día
Diario El Día de La Plata, fundado el 2 de Marzo de 1884.
© 2024 El Día SA - Todos los derechos reservados.
Registro D.N.D.A Nº RL-2019-04027819-APN-DNDA#MJ Propietario El Día SAICYF. Edición Nro. 6986 Director: Raúl Kraiselburd. Diag. 80 Nro. 815 - La Plata - Pcia. de Bs. As.
Bienvenido
Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí
Ante cualquier inconveniente durante el inicio de sesión, por favor escribanos a sistemas@eldia.com
Bienvenido
Estimado lector, con sólo registrarse tendrá acceso a 80 artículos por mes en forma gratuita. Para más información haga clic aquí
DATOS PERSONALES
Ante cualquier inconveniente durante el inicio de sesión, por favor escribanos a sistemas@eldia.com
¿Querés recibir notificaciones de alertas?
Para comentar suscribite haciendo click aquí