Dos brutales femicidios seguidos de suicidios sacuden a la Provincia
Edición Impresa | 21 de Septiembre de 2022 | 04:07

Dos mujeres fueron asesinadas en manos de sus exparejas, quienes después de cometer los crímenes se quitaron la vida.
Uno de los hechos sucedió dentro de una panadería ubicada en la localidad bonaerense de Loma Hermosa, donde la víctima -Verónica Esther Villalba (52)- cumplía funciones como empleada.
El femicidio ocurrió cerca de las 6.20 de ayer, en Morganti y Florida. Un testigo relató que vio cuando ingresó un hombre armado y, sin mencionar una palabra, se dirigió al interior de la panadería donde se encontraba Villalba y efectuó varios disparos.
Rápidamente, fue solicitada una ambulancia del Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME) y un médico constató que tanto la mujer que trabajaba en la panadería, como el agresor, se encontraban muertos.
Las pericias preliminares realizadas por personal de la comisaría quinta de Tres de Febrero, bajo las órdenes de la fiscal Marcela Costa, a cargo de la UFI Nº 6 de San Martín, establecieron que la mujer recibió dos disparos en la zona izquierda de la cabeza y otro en el pecho.
En tanto, el hombre, identificado como Hugo Antonio Marchi, ex pareja de Villalba, se suicidó con un balazo en parte derecha de la cabeza.
Junto a él se halló un revólver que utilizó para cometer el femicidio y su posterior suicidio.
UN HECHO SIMILAR, PERO EN TRES LOMAS
Una mujer fue asesinada a puñaladas en su casa del partido bonaerense de Tres Lomas, por su esposo. Tras cometer el crimen, el implicado huyó en un auto y se suicidó al chocar a alta velocidad contra un camión.
El hecho ocurrió cerca de las 8 de la mañana de ayer, y los investigadores descubrieron primero la muerte de Héctor Mansilla (63) tras el choque de su auto con un rodado en el kilómetro 279 de la ruta nacional 33, pero cuando acudieron a su vivienda para avisarle a su esposa, Mirta Cabrera (57), la hallaron asesinada a puñaladas.
Fuentes judiciales y policiales informaron que cerca de las 6 de la mañana, los hijos de la mujer que vivían en la parte trasera del terreno escucharon una discusión entre la madre y su esposo, con el que estaba casado desde hacía dos años.
Al preguntarle a la mujer qué sucedía, ella les respondió que estaba todo bien y regresaron a su casa a dormir. Se cree que, luego, el hombre atacó a puñaladas a la mujer y la dejó muerta en uno de los ambientes de la casa.
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