Los escándalos de Alec Baldwin: de una piña a un fotógrafo a un disparo mortal
Edición Impresa | 9 de Abril de 2023 | 04:41

Con 65 años recién cumplidos, Alec Baldwin ha sido conocido por su trabajo en la pantalla en obras maestras como “La caza del Octubre Rojo”, “Beetlejuice” o “Los infiltrados”. Pero, también, ha ocupado los titulares de los medios por varios eventos ajenos a su trabajo en el mundo de la interpretación: su carrera ha estado marcada por la polémica.
En la versión corta, Baldwin comenzó en la actuación durante la visita a un amigo en la New York University. “Estaba en la universidad en Washington DC. Hice tres años a tiempo completo”, recordó el actor a Interview Magazine a finales de los ochenta. “Cumplí con todos mis requisitos y mi último año fue realmente un año instintivo. Y dije: la escuela de derecho siempre estará ahí. No tenía prisa por entrar en eso”.
Baldwin quería ser presidente de los Estados Unidos, pero también siempre había querido probar la interpretación. Así que a finales de los setenta se mudó a Manhattan para formase en arte dramático. Trabajó brevemente como ayudante de camarero en Studio 54 y luego como camarero en la cafetería de la azotea de un gimnasio donde una mujer se fijó en él y lo puso en contacto con un productor amigo suyo. Baldwin consiguió entonces un papel en la telenovela “The Doctors”, en la que estuvo de 1980 a 1982.
A menudo se ha hablado de Baldwin por motivos ajenos a su faceta profesional
Durante los años siguientes siguió haciendo trabajos televisivos como “Cutter to Houston” y “Knots Landing”. También se subió a las tablas del teatro y en 1986 participó en su primera producción de Broadway. Un año después debutó en el cine con “Forever, Lulu”. En 1988, Baldwin estrenó diversas cintas como “Beetlejuice”, “Working Girl” y “Married to the Mob”. Dos años después, su interpretación del agente de la CIA Jack Ryan en “La caza del Octubre Rojo” consolidó su status de estrella.
Era un galán. Y en 1991, “The Marrying Man” llegó a los cines. En esta película, Baldwin conoció a Kim Basinger, con quien compartía cartel, y con quien inició una relación que oficializaron tres años más tarde en el altar. Dos años después nació la única hija en común de la pareja, Ireland. El matrimonio entre ambas estrellas duró hasta 2001 y se divorciaron en 2002. Una década después del divorcio, Baldwin contrajo matrimonio con Hilaria Baldwin, su actual esposa, con quien ha tenido otros seis hijos, la última de ellos nacida en 2021 a través del alquiler de la madre.
Baldwin también proviene de una familia numerosa, de hecho, él es el mayor de los seis hijos, de los que cuatro, los varones, se dedican a la interpretación, del matrimonio formado por dos profesores. “Creo que soy simplemente como mucha gente que no tenía nada”, dijo el actor a Vanity Fair en 2012. “Teníamos que entretenernos, así que tuvimos que volvernos divertidos. Mis hermanos eran graciosos y había muchos numeritos y comedia y canalladas, violencia, peleas y deportes”.
Durante los noventa, Baldwin participó en títulos como “Miami Blues”, “Glengarry Glen Ross”, “Ghosts of Mississippi” y “Notting Hill”, entre otras. También siguió trabajando sobre las tablas y protagonizó “Un tranvía llamado deseo”, en 1992, y “Macbeth”, en 1998. En la primera década del nuevo milenio, Baldwin sumó a su carrera títulos como “Pearl Harbor”, “The Cooler”, por la que recibió su primera y única nominación al Óscar hasta la fecha, “El aviador” y “Los infiltrados”, entre otras.
LOS LÍOS
Pero, claro, además de todos estos créditos en su curriculum, de los lauros y los romances, a menudo se ha hablado de Baldwin por motivos ajenos a su faceta profesional.
Su primer gran escándalo aconteció a mediados de los noventa, cuando el actor fue arrestado por pegar un puñetazo a un paparazzi cuando él y Basinger, su entonces mujer, volvían a casa del hospital con su recién nacida.
Unos años después, en 2007, se hizo público un mensaje de voz dirigido a su hija de 12 años en el que la llamaba, según publicó US Weekly, “cerdita grosera y desconsiderada”.
Los escandaletes siguieron aconteciendo, uno tras otro. Unos años después, fue expulsado de un vuelo porque se negó a apagar el teléfono móvil cuando el equipo de a bordo se lo solicitó y fue, según la compañía aérea, maleducado con la tripulación. Y en 2013 profirió un insulto homófobo a un fotógrafo con el que discutía y un año después fue detenido tras circular en bicicleta en dirección prohibida.
El último incidente en el que Baldwin protagonizó titulares por motivos ajenos a su trabajo, claro, fue en 2021, cuando disparó una pistola de utilería que debía tener munición de fogueo y de manera accidental hirió mortalmente a la directora de fotografía Halyna Hutchins en el rodaje de “Rust”. Baldwin ha sido acusado de homicidio involuntario y podrían enfrentarse a una pena máxima de 18 meses de cárcel, en una causa que todavía sigue abierta.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE