Bienestar: sentirse más joven, clave para mejorar la salud y vivir más

Sentirse más joven podría ayudar a los adultos de mediana y avanzada edad a una mayor sensación de bienestar, mejorar notablemente su salud e incluso vivir por más tiempo.

La sensación de una edad más joven se asocia con una mejor salud general y puede ayudar a un envejecimiento saludable más allá de la edad cronológica, según muestran diversos estudios.

La forma en que las personas se sienten acerca de su edad fue cambiando con el tiempo, y los adultos mayores que se sienten jóvenes también viven su vida con una mayor satisfacción.

MENTALIDAD JUVENIL

“Eres tan viejo como te sientes”. Aquello que podría ser denominado como una simple frase podría convertirse en una verdad, De este modo, estudios refuerzan la idea de que quienes se sienten más jóvenes que su edad real y tienen una mirada optimista de la vida tienden a ser más saludables y más resistentes mentalmente. Es más, los expertos indicaron que podría ser de gran ayuda a la hora de que las personas mayores se recuperen de problemas físicas.

Una investigación realizada por científicos israelíes de la Universidad Bar-Ilan afirmó que, incluso en la vejez, tener una mentalidad juvenil podría mejorar las posibilidades de recuperarse con éxito de situaciones asociadas a la salud.

Según indicaron los científicos, la edad subjetiva fue el predictor más fuerte de los resultados de la rehabilitación, incluso por encima de la edad cronológica de los pacientes y las múltiples condiciones de salud crónicas que ocurren simultáneamente en el momento del ingreso.

Sentirse más joven puede ayudar a las personas adultas de mediana y avanzada edad

Los especialistas concluyeron que “sentirse más joven tiene efectos positivos en las personas que se recuperan de distintos problemas relacionados a la salud.

MÁS JÓVENES QUE ANTES Y LA BRECHA DE GÉNERO

Un estudio publicado recientemente en Psychological Science afirmó que, con el tiempo, los adultos se sienten más jóvenes y más jóvenes que aquellos de la misma edad cronológica en el pasado.

Cada década que pasó confirió una edad subjetiva aproximadamente un 2% más joven. Por ejemplo, una persona de 60 años nacida en 1936 se sentiría más como si tuviera 53 años, o solo un 12% más joven. Pero una persona de 60 años nacida en 1956, dos décadas después, se sentiría como si tuviera 50 años, o un 17% menos.

La investigación también encontró una brecha de género pronunciada. Las mujeres se sienten más jóvenes que los hombres de su misma edad, una brecha que amplió en los últimos años, lo que puede explicar algunas de las tendencias en el sentimiento juvenil: las mujeres generalmente viven más y se sienten más saludables que los hombres, pero también están sujetas a una mayor presión social solo por envejecer.

La edad subjetiva no es solo un marcador del envejecimiento, sino también un estado mental, y el estado de ánimo parece influir en la edad subjetiva de las personas, al menos a corto plazo. Un estudio encontró que si haces que los adultos se sientan tristes al darles lecturas o música tristes, se sienten mayores después. Lo contrario también podría ser cierto.

Otro estudio encontró que los adultos mayores que recibieron comentarios positivos en una prueba de memoria y les dijeron que se desempeñaron bien en comparación con otros de su edad, tendieron a sentirse más jóvenes después. También se desempeñaron mejor en una prueba posterior.

La actividad física y la reducción del estrés también tienen un efecto positivo a largo plazo sobre la edad subjetiva, dijo Wettstein.

LA FÓRMULA PARA “ENVEJECER CON EXUBERANCIA”

En su libro, la escritora sueca Margareta Magnusson comparte su “Sabiduría vital de alguien que (probablemente) morirá antes que usted”, con consejos prácticos que, alejados de la autoayuda tradicional, tienen una gran carga humorística e irónica.

La autora -actualmente tiene 89 años- elabora reglas sencillas y de aplicación universal para cualquiera que piense en el tiempo que le queda.

No hay directrices para adoptar un estilo de vida aspiracional ni promesas de productos que puedan proteger al lector de la inevitabilidad del envejecimiento. En su lugar, Magnusson recopila momentos privados para revelar las lecciones de vida que quiere impartir: “Vive dentro de tus posibilidades, disfruta del momento (especialmente con niños), y no te quejes”.

LAS REGLAS

Rodarse de jóvenes. No solo brindan nuevas ideas y perspectivas, dijo, sino que “es una forma de mantenerse en sintonía con la persona joven que usted mismo fue en algún momento”.

Pasar tiempo con personas más jóvenes también puede beneficiar a tu cerebro.

Hay investigaciones que sugieren que a medida que se envejece, especialmente si se comienza a experimentar cierto declive cognitivo, socializar con personas más jóvenes mentalmente agudas puede brindar el tipo de estimulación que ayuda a mejorar el funcionamiento cognitivo, explicó.

La forma en que las personas se sienten acerca de su edad fue cambiando con el tiempo

Embrace kärt besvär. Esta frase sueca combina kärt, que significa “querido o apreciado”, y besvär, que significa “dolor”. “A medida que envejeces, es fácil sentirse frustrado y quejarse”, dijo Magnusson. Pero kärt besvär la ayuda a vivir con alegría. Así, Magnusson quiere explicar la idea de que está bien apoyarse en las emociones.

Laura Carstensen, psicóloga del Stanford Center on Longevity, que estudió los cambios emocionales que ocurren con la edad, dijo: “Descubrimos que las personas mayores son más propensas a reportar una especie de mosaico de emociones que las personas más jóvenes”. Mientras que las personas más jóvenes tienden a ser “totalmente positivas o negativas”, dijo, las personas mayores son más capaces de experimentar alegría “con una lágrima en los ojos”, agregó.

Decir “que sí”. Uno de los conceptos erróneos sobre las personas mayores, según Regina Koepp, psicóloga clínica y fundadora del Centro para la Salud Mental y el Envejecimiento en Burlington, es que “son rígidos y nunca cambiarán”, dijo. Para envejecer exuberantemente, debe reconocer activamente su “discriminación por edad internalizada” y luchar contra ella, dijo Koepp. Decir “sí” tan a menudo como sea posible, agregó, “es en efecto decir ‘sí’ a la vida: ser curioso y explorador, ser parte de la comunidad”.

Es fundamental afrontar todo con buen humor / Freepik