VIDEO. Armas, gritos de auxilio y vidrios estallados: una banda causó terror en una heladería de La Plata
| 8 de Enero de 2024 | 10:49

Una noche de terror se vivió en una heladería de La Plata este domingo. Actuó una banda armada y sembró pánico en un local de 38 entre 134 bis y 135, del barrio San Carlos, donde hubo pedidos de auxilio a los gritos cuando llegó la policía y se encontró con uno de los ladrones, menor de edad, que había tomado de rehén al empleado, mientras otros dos habían escapado.
Según el parte policial al que accedió EL DIA, un llamado de alerta al 911 advirtió por un robo en proceso en una sucursal de la heladería “Gustito”. Al arribo de los efectivos advirtieron que la vidriera del local se encontraba con los paneles estallados y en la vereda un grupo de personas aseguraban que un joven, de 17 años, se encontraba aún dentro del comercio.
Fue así que una mujer policía, al encontrar la puerta cerrada, terminó de derribar el blíndex para poder entrar, por lo que una vez adentro observaron al chico portando un revólver e intentando ingresar al baño, desde donde se escuchaban gritos de auxilio, que luego se confirmó que eran del encargado al que había tomado de rehén, de 22 años.
Tras un dramático momento y cargado de tensión, inmediatamente procedieron a reducir al ladrón y hacer salir del baño a la víctima, quien contó que instantes antes éste joven junto a otros dos lo habían intimidado con el revólver para ingresar y sustraerle pertenencias.
Tras el mal trago que le tocó vivir a los que se encontraban dentro de esa heladería, la policía incautó el arma utilizada, un revólver BAGUAL Pasper, calibre 22, con falta de martillo y sin municiones, además de $3200 en efectivo, y cajas de bombones helados que habían sido preparadas por la banda para llevárselas.
En el caso tomó intervención la Secretaria de la UFI del Joven Nro. 1 de nuestra ciudad, que abrió una causa caratulada como "robo calificado por empleo de arma no apta para el disparo y por ser cometido en poblado y en banda". Asimismo avaló la aprehensión del menor y dispuso el alojamiento en un Centro de Recepción de Menores. También en el lugar trabajó la Policía Científica en busca de pruebas que aporten datos a la causa.
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