La postura de Lousteau, que toma distancia casi todo el radicalismo

Carlos Barolo

Martín Lousteau es senador nacional por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. También es el presidente de la Unión Cívica Radical a nivel nacional. Su postura en la votación de la Ley Bases podría marcar una suerte de quiebre bastante inédito en el radicalismo: una posición absolutamente diferenciada de la postura de la mayoría de su partido, en una votación que asoma crucial no sólo para el Jefe de Estado, Javier Milei, sino para el país.

Lousteau presentó un dictamen de su autoría de la Ley Bases y el paquete fiscal, que por supuesto no será abordado. Fue su manera de decir que no apoya el de mayoría que salió para ser tratado en el recinto hoy y, tal vez, una forma de no quedar tan pegado con el kirchnerismo, bancada con la que ha mostrado cierta afinidad en el ejercicio de oponerse a los proyectos que el Gobierno libertario considera fundacionales.

Tanta es la buena sintonía que las malas lenguas de la política especulan que el año próximo, en la elección de medio término, el radical podría confluir en un mismo espacio electoral con el perokirchnerismo porteño para enfrentar a lo que probablemente sea una alianza entre el PRO, que gobierna el distrito hace añares, y La Libertad Avanza. Habladurías.

Lo notable es que el dictamen de minoría que presentó Lousteau en el Senado no es apoyado por ningún senador de la UCR, teóricamente sus dirigidos en términos partidarios. Y va en contra de la opinión de los gobernadores del radicalismo, quienes acaban de sacar un contundente apoyo a la Ley Bases en conjunto con los mandatarios del PRO.

Hablamos de Gustavo Valdés (Corrientes), Leandro Zdero (Chaco), Carlos Sadir (Jujuy), Alfredo Cornejo (Mendoza) y Maximiliano Pullaro (Santa Fe). Lo dicho: estos, sumados al porteño Jorge Macri, el chubutense Ignacio Torres, el sanjuanino Marcelo Orrego, el entrerriano Rogelio Frigerio y el puntano Claudio Poggi acaban de firmar un documento pidiendo la aprobación de Bases y el paquete fiscal para que no se afecten las cuentan provinciales.

La postura de Lousteau lo expone ante su partido, que atraviesa una etapa de redefiniciones luego de la explosión de la alianza antes conocida como Juntos por el Cambio tras la derrota en las elecciones generales del año pasado.

Una jugada solitaria

En la previa del tratamiento de estas leyes clave en el Congreso, la senadora Carolina Losada le puso voz a lo que sería un reclamo generalizado de la bancada radical: “Martín siempre tiene jugadas en solitario”, dijo la santafesina. Además, aseveró que no representa al bloque y dejó trascender que no siempre participa de las reuniones de su bancada.

“Es extraño al menos que alguien saque un dictamen propio, pero Martín siempre tiene jugadas en solitario. Yo creo que llega un poco en forma tardía porque cuando uno quiere construir para sacar algo mejor de una ley, lo hace durante las comisiones. Los planteos, si se hubieran hecho en comisión, muchos hubieran sido tomados por el Gobierno, como los del resto del bloque, pero es su estrategia”, indicó Losada en declaraciones radiales.

Se aclara: el bloque de la UCR, casi todo, acompañó el dictamen de mayoría que impulsó La Libertad Avanza, fuerza que sólo cuenta con un puñado de siete senadores.

Sobre el dictamen propio de Lousteau, Losada dijo: “No tiene nada que ver con nosotros. Nosotros lo vimos como lo vio la prensa, un rato antes nos lo mandó y no tiene nada que ver con el trabajo que venimos haciendo hace meses”. Contundente. Tanto como cuando lo definió como “uno más” dentro del bloque que “no vale ni más ni menos que el resto”.

“Hay mucha gente que cree que como es el presidente del radicalismo, todo el radicalismo responde a él. Y eso definitivamente no es así. Cada uno tiene autonomía y es un partido totalmente horizontal. En este caso está haciendo un dictamen propio individual y en el caso del DNU, él votó negativo y el resto, positivo. No está representando al bloque radical”, ahondó Losada. Fue una foto exacta de Lousteau en el Senado, casi un “independiente” más que un orgánico del partido que preside. Raro.

En la CABA, Lousteau -que compitió en la interna de JxC contra Jorge Macri por la candidatura a jefe de gobierno, cargo que finalmente obtuvo el primo de Mauricio- es aliado del exdiputado nacional y vice rector de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Emiliano Yacobitti. Quien fuera la cara de la multitudinaria marcha en favor de la universidad pública que debió soportar Milei cuando retaceó fondos para el financiamiento de ese sector.

Yacobitti llegó a decir que el documento que firmaron los gobernadores de la oposición dialoguista, entre ellos los mencionados radicales, era “falso” y que el santafesino Pullaro no lo había rubricado. Lo desmintió el propio Pullaro horas después, en un programa de televisión: avaló el documento donde estaba su firma y tomó distancia del proyecto de Lousteau, a pesar de sus vínculos políticos y de amistad con el jefe radical. Es más, reconoció que votó a Milei en el balotaje. En las PASO, aclaró, lo hizo por Rodríguez Larreta y en la general, por Patricia Bullrich.

Respecto a los votos radicales en la sesión de hoy, el mundo político se preguntaba ayer qué hará el senador por la provincia de Buenos Aires Maximiliano Abad, que además es el presidente de la UCR bonaerense y partidariamente se lleva bien con Lousteau. Anoche quedaba claro que no adheriría al dictamen del porteño pero el Gobierno no tenía asegurado su voto. Integraba un lote junto a dos senadores santacruceños -José Carambia y Natalia Gadano, que responden al gobernador peronista no K, Claudio Vidal- que la Rosada no podía contar con absoluta certeza como respaldos al dictamen de mayoría.