La Plata, sin paz: salieron de paseo y los desvalijaron

Una familia sufrió pérdidas millonarias luego de que una banda de delincuentes ingresó en su morada y le sacó hasta la ropa

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La ola de robos con la modalidad del escruche sigue azotando a la Región, dejando un rastro de inseguridad y desesperación en su camino. En la última semana, al menos cinco casas han sido objeto de este tipo de delito, siendo los casos del robo de más de 10 millones de pesos en municiones y armas, ocurrido en City Bell, y el de la sustracción de un colchón en Romero, los más resonantes.

Con total impunidad, los ladrones que se desempeñan en este nicho delictivo continúan robando dinero, joyas y objetos de valor a sus víctimas. La mecánica es simple: irrumpen por la fuerza en las casas, se apoderan de todo cuanto pueden y huyen. En ese marco, en la mayoría de las comunas pulula un clima de miedo y desconfianza entre los vecinos, quienes se sienten vulnerables y abandonados por las autoridades.

Es que el sacrificio y el esfuerzo que hacen las familias ausentándose largas horas de sus moradas para trabajar y estudiar, apostando a un mejor futuro, terminan diluyendo como arena entre los dedos por los astutos criminales, que causan estragos en los hogares.

Esto fue lo que le sucedió recientemente a un vecino del barrio La Cumbre, que se sumó a la extensa lista de víctimas de este tipo de delitos que están proliferando en la Región. Según informaron fuentes policiales, una banda de ladrones ingresó a su propiedad ubicada en 529 entre 133 y 134, tras forzar una puerta.

Mientras el propietario, de 54 años de edad, se encontraba con su familia participando de una reunión, los delincuentes saquearon la casa llevándose una infinidad de objetos entre los que se destacan consolas de videojuegos, electrodomésticos, instrumentos musicales y hasta indumentaria.

No hay precisión aún sobre el momento exacto en el que se concretó el atraco, pero fuentes vinculadas al caso especificaron que la banda contó con una ventaja de tiempo de casi 6 horas que comenzó a correr a las 18.30 horas, cuando la familia dejó la casa.

Alrededor de la medianoche, el propietario regresó a su hogar y se encontró con el desastre al abrir su portón.

Aunque el caso está siendo investigado, una de las hipótesis sugiere que los ladrones realizaron tareas de inteligencia previas en el vecindario antes de lanzarse al ataque.

Ahora buscan en cámaras de seguridad de la zona rastros de los responsables.

 

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